_
_
_
_
_

Jordi Pujol mejora y ya puede hablar y comer, pero la resonancia muestra una “lesión”

El expresidente catalán evoluciona favorablemente del ictus sufrido el pasado lunes

Jordi Pujol
Un grupo de periodistas monta guardia ante el Hospital de Sant Pau de Barcelona donde se halla ingresado Jordi Pujol.Marta Pérez (EFE)

El expresidente de la Generalitat, Jordi Pujol, que el pasado lunes sufrió un ictus y fue intervenido en el Hospital de Sant Pau, evoluciona favorablemente, su estado clínico ha mejorado, ya puede hablar y ha comenzado a comer, aunque una resonancia ha confirmado una lesión en la región temporal izquierda de su cerebro.

Según el parte médico emitido este jueves por el Hospital de Sant Pau, el expresidente catalán, de 92 años, sigue ingresado en la Unidad de Ictus de Sant Pau, donde permanecerá toda esta semana en observación. “La evolución en las últimas 24 horas es favorable y su estado clínico ha mejorado. Se encuentra consciente, puede hablar y ha iniciado la ingesta de comida”, han explicado los médicos que le atienden.

Sin embargo, la resonancia cerebral que le practicaron ayer por la tarde ha confirmado una lesión en la región temporal izquierda, una zona que corresponde al territorio distal de la arteria cerebral media izquierda, donde se hallaba la oclusión que fue tratada el pasado lunes mediante un tratamiento endovascular. El hospital ha informado de que el expresidente de la Generalitat permanecerá ingresado toda esta semana en observación y para valorar la evolución de su estado neurológico.

En ese sentido, en declaraciones a Rac1, Albert Lleó, el médico que supervisa la evolución de Pujol, ha señalado que la resonancia “muestra una lesión”, si bien “eso no quiere decir que queden secuelas, porque cada persona se recupera de manera diferente”. “Puede tardar meses y ahora es prematuro decir qué secuelas quedarán a nivel de lenguaje, porque dependerá de la evolución”, ha apuntado Lleó, que ha explicado que Pujol “está bajo el efecto de la medicación sedante y no tiene un estado de alerta suficiente que nos permita evaluar el detalle de su nivel cognitivo y de lenguaje”.

El expresidente catalán y líder de la extinta CiU ingresó en Sant Pau a las cinco de la tarde del pasado lunes procedente del Hospital de Barcelona por una obstrucción aguda en una arteria cerebral, cuya sintomatología comenzó con un trastorno del lenguaje.

A pesar de tener 92 años, el equipo médico, de acuerdo con la familia del expresident, acordó someterlo a una intervención para retirar el trombo, porque estaba “en buenas condiciones previas pese a su edad” y dentro de las ocho horas desde el inicio de síntomas, según explicaron los neurólogos que le atienden en el Hospital de Sant Pau. El equipo médico le aplicó un tratamiento endovascular, que consistió en la extracción mecánica del trombo a través de la arteria femoral, en una intervención que fue exitosa.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_