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EDUCACIÓN

Magda Puyo dice que no dimitirá por el caso de los abusos

Los estudiantes critican que el Institut del Teatre “no asuma su responsabilidad”

El País
Institut del Teatre
Protesta de alumnos del Institut del Teatre.Alejandro García (EFE)

La directora del Institut del Teatre, Magda Puyo, aseguró ayer que no dimitirá por los casos de acoso sexual y abuso de poder denunciados en el centro y ha asegurado que el protocolo contra agresiones, vigente desde 2018, es “magnífico” y que, en todo caso, ha fallado su aplicación. En una entrevista en TV3, Puyo, a quien los estudiantes piden la dimisión y la de su equipo por estos casos, ha señalado que “a lo mejor” algunos docentes conocían el presunto comportamiento de profesores como Joan Ollé, que a raíz de las denuncias destapadas por el diario Ara ha sido apartado de las clases, pero que “no se puede trabajar con rumores de pasillos”. Sobre las peticiones del alumnado para que dimita, la directora afirmó: “Cuando hay problemas no me planteo dejarlo porque me parece muy cobarde”.

Puyo aseguró que el Institut, que el martes pidió formalmente disculpas por los hechos (aunque los estudiantes consideran que debió hacerse de manera más pública), está al lado de las víctimas y que está trabajando para corregir los errores que haya podido cometer. “A lo mejor se han tomado medidas, pero eran medidas que no llegaban al fondo de la cuestión”. En este sentido, consideró que la aplicación del Protocolo para la prevención, detección y actuación del acoso sexual, por razón de sexo, orientación sexual y/o identidad de género, no ha funcionado por “problemas de comunicación” y por el miedo de las víctimas a denunciar.

Sobre las medidas adoptadas por la institución, la directora ha anunciado que el próximo lunes se pondrá en marcha un servicio de ayuda psicológica para los alumnos que lo necesiten. Asimismo, ha explicado que la Comisión de Prevención y de Investigación de Acosos prevista en el protocolo ya ha recibido una primera denuncia formal contra Ollé por parte de un grupo de siete estudiantes que el pasado otoño tuvieron al director teatral como profesor.

La directora también se refirió al frecuente consumo de alcohol de Ollé denunciado por los estudiantes: “En cualquier oficio, aún es muy difícil tratar las enfermedades mentales, se necesita más ayuda de la que tenemos. No somos especialistas en estas cosas. En este caso, a lo mejor podríamos haber pedido un especialista que nos guiara”. “De todas formas”, añadió Puyo, “a una persona enferma hay que ayudarla y es lo que hemos intentado día a día. No lo hemos logrado, a lo mejor necesitaba mucha más ayuda médica”.

Puyo reflexionó que tanto en el mundo del teatro como en la sociedad en general ha habido un “cambio de paradigma en la relación entre personas y la relación de poder”. “Que antes hubiera otro paradigma no justifica lo que se hacía, aunque lo toleráramos como normal”.

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