España registra las peores cifras de ahogamientos mortales de los últimos cinco años
249 personas mueren en espacios acuáticos en los siete primeros meses de 2023. 79, solo en julio. Cuatro de cada cinco eran hombres y la mitad, personas mayores de 55 años
Conforme aprieta más el calor, más gente se baña en el mar, en las piscinas, en los ríos, en los lagos o en los embalses. España bate récords de temperatura y en los primeros siete meses ha registrado el peor número de ahogamientos mortales desde hace cinco años. Un total de 249 personas han fallecido en espacios acuáticos españoles, un 12,6% más que en el mismo periodo del pasado año, según los datos recopilados por el Informe Nacional de Ahogamientos (INA), elaborado por la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo y que la organización ha dado a conocer este jueves. A estas cifras hay que añadir cuatro ahogados hasta este miércoles, 2 de agosto, según los datos provisionales de la misma entidad.
Un joven socorrista apostado en la playa de La Malva-rosa de Valencia comentaba este jueves: “Hay gente que no hace caso ni a las banderas rojas que prohíben el baño ni menos aún a las amarillas de precaución. Se confían demasiado. Algunos vienen a la playa solo unos días y tienen que aprovechar, nos dicen, aunque la mar esté mal. Y eso incrementa el riesgo, claro”.
En el pasado mes de julio murieron 79 personas. La Comunidad Valencia encabeza esta luctuosa lista con 19 fallecidos, dos más que Cataluña, y nueve por encima de Andalucía. Especialmente trágico fue el 25 de julio en la playa de Marenys de la población valenciana de Tavernes de la Valldigna. Dos amigos de 60 años y una mujer de 45 fueron rescatados del agua sin poder ser reanimados en la arena. Se estaban bañando en una playa virgen, sin urbanizar, que carece de vigilancia y servicio de socorrismo. En la playa anexa ondeaba la bandera roja. Las tres eran vecinos de Rafelguaraf, a unos 23 kilómetros de donde sucedieron los hechos.
En 29 de los 79 ahogamientos registrados en julio no había servicio de vigilancia; en otros 29 casos no procedía (por la tipología del lugar, no hay servicio, como en una piscina particular o en un puerto); y en 21 de ellos estaba activo el servicio socorrista. Durante este mes, 28 de las 79 muertes, más del 35%, se concentraron en cuatro días y 17 de estas personas fallecieron en un único fin de semana, el del sábado 8 y domingo 9. La otra sucesión de jornadas fatales fueron el martes 25 y el miércoles 26, con 11 fallecimientos, según los datos del INA.
“Las negligencias o la falta de precaución suelen ser las principales causas de los incidentes y rescates en el agua. Y suele haber más problemas con los hombres que con las mujeres”, señala otro socorrista en la playa de La Patacona, del municipio de Alboraia. Ocho de cada diez personas ahogadas en estos primeros siete meses eran hombres. Las víctimas mortales masculinas superan ampliamente a las femeninas, año tras año.
“El tramo de edad de 55 años en adelante vuelve a ser, siguiendo la tendencia del pasado año, en el que más muertes se han producido, 39 de las 79 en julio (casi el 50%), 13 de ellas de personas de entre 55 y 64 años, 16 de entre 65 y 74 y 10 de 75 o más años”, explica la nota de la Federación. Entre los menores, más de la mitad de los ahogamientos mortales se registró en julio, 9 de los 17 acumulados en 2023.
La playa, el lugar con más óbitos
La playa es el lugar donde se sucedieron más óbitos en el mes de julio (43) y donde se han registrado 133 de los 249 (53,41%) en lo que va de 2023. En julio han fallecido 22 personas en piscina, 6 en río y 8 en otros espacios acuáticos. La mayoría de las personas ahogadas, 62 de las 79, tenían nacionalidad española, 13 eran extranjeros (6 de procedencia europea, 1 africana, 4 asiática y 2 americana) y 4 eran de origen desconocido. Un total de 58 fallecimientos de ese mes, el 73,4%, se dieron entre las 8.00 y las 20.00 horas y, entre ellos, 28 en el tramo de 16.00 a 20.00 horas. Los horarios del servicios de socorrismo dependen de cada municipio. En las playas de El Cabanyal y La Malva-rosa, de Valencia, por ejemplo, es de 10 a 20 horas.
“Hay que tener respeto al mar y hay mucha gente que viene de fuera y no conoce estas playas de Valencia que son normalmente tranquilas, pero no siempre”, indica otro socorrista, desplazado a El Cabanyal. Por muy buen físico que tengas, si hay una corriente muy fuerte no puedes nadar contra ella, has de dejarte llevar para intentar salir por un lateral, aunque esté alejado de tus toallas. También es verdad que algunas de las personas que ha tenido problemas dentro del agua ya tenían alguna patología previa”.
Andalucía, con 38 muertes en lo que va de año, se sitúa a la cabeza de las comunidades autónomas, por delante de Cataluña (37 fallecimientos), la Comunidad Valenciana (33), Canarias (31), Galicia (23), Islas Baleares (15), Asturias (13) y Castilla y León (12).
Para la presidenta de la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo, Isabel García Sanz, el hecho de que 2023 sea hasta el momento el año más luctuoso en el último lustro y el tercero en la serie histórica registrada en el INA, que recoge datos desde 2015, después de 2017, cuando hubo 306 muertes, y 2016, con 266, pone de manifiesto “la perentoria necesidad de que las instituciones públicas, y en este caso el Gobierno de España, aborden la puesta en marcha de una Estrategia Estatal de Seguridad Acuática que acabe con las disfunciones, cuando no el caos entre Administraciones, en la gestión de una realidad que no es otra que la de proteger la vida de las personas en el medio acuático”.
En Barcelona, el pasado fin de semana hubo amenaza de huelga de socorristas que finalmente se desconvocó después de que la empresa a la que se ha subcontratado el servicio se comprometiera a contratar más personal. Luis Muñoz, el portavoz de los socorristas en huelga, cree saber a qué se debe el aumento de fallecidos en las playas catalanas: “En los últimos meses hay cada vez más afluencia de bañistas y no todos los municipios tienen socorristas o los horarios y el calendario necesario para cubrir todas las franjas”.
Los profesionales del sector piden, sobre todo, una normativa uniforme e igualitaria para todos los municipios. “Otro de los problemas es el de personal. Al final, los socorristas acaban cobrando 1.300 euros al mes y solo tienen empleo cuatro meses al año”, lamenta Oriol Canals, director de Proactiva Servicios Acuáticos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.