La Asamblea del PNV y los militantes del PSE ratifican el pacto de coalición que hará lehendakari a Urkullu

La Asamblea nacional de EAJ-PNV ha dado luz verde por unanimidad a la coalición con el PSE-EE. Sus miembros han ratificado poco después de las 20 horas de este lunes el acuerdo que las comisiones negociadoras de ambos partidos alcanzaron la pasada semana para la conformación de un Gobierno presidido por Iñigo Urkullu. Los socialistas vascos lo han respaldado en una consulta interna por el 93% de los 2.992 votos emitidos de un censo de 5.115. Era el último trámite antes de la firma, que está prevista para las 12,30 de este martes 1 de septiembre en el Parlamento vasco. A partir de ahora los partidos trabajarán en la estructura del Gobierno y en el reparto de los departamentos. Todo apunta a que el PNV tendrá 8 consejerías y el PSE-EE, tres, como esta pasada legislatura. La duda es si la secretaria general de los socialistas vascos, Idoia Mendia, entrará al Gobierno.

Los principales ejes de la acción del Gobierno serán la reactivación económica y la generación de empleo desde la defensa de los servicios públicos y las políticas sociales, “sobre la base de más y mejor autogobierno”, cita una nota remitida tras la Asamblea por el PNV. “Este documento ya recibió el pasado jueves el visto bueno del Euzkadi Buru Batzar, y hoy ha recibido su refrendo oficial por parte de la Asamblea Nacional de EAJ-PNV, que es el órgano al que compete la aprobación definitiva de los acuerdos de esta naturaleza. EAJ-PNV informará en breve de los detalles de la firma del acuerdo, siempre y cuando las bases del PSE-EE también lo validen en la tarde de hoy”. A partir de mañana, PNV y PSE comenzarán a trabajar en la estructura del Gobierno, que seguramente seguirá con ocho consejerías para el PNV y tres para los socialistas. Queda la duda de si Idoia Mendia entrará al Ejecutivo con una cartera social de peso.

PNV y PSE se comprometen a avanzar en una reforma fiscal y a “trabajar estrechamente” con el Gobierno de Pedro Sánchez. “Nos comprometemos a avanzar en el diseño de esa nueva fiscalidad y hacer una reflexión meditada sobre la reforma fiscal pendiente”, indican las formaciones como resumen de su pacto. Según los partidos, la fiscalidad deberá adecuarse a la nueva realidad, estar orientada a una mayor progresividad para el reforzamiento de los servicios públicos y apoyar una economía generadora de empleo, que tienda a la convergencia fiscal con Europa y que permita adaptarse a los retos emergentes incluyendo criterios medioambientales.

Nacionalistas y socialistas consideran que el sistema de servicios sociales requiere de un “nuevo impulso” para acomodarlo a los desafíos de la sociedad vasca, con especial atención al desafío demográfico, y se comprometen a “colaborar estrechamente con el Gobierno español” para la materialización y gestión de los fondos europeos del Programa Next Generation EU, así como en el plan nacional de recuperación y resiliencia que elabore el Estado español para remitirlo a Europa. El nuevo Gobierno vasco elaborará una relación consensuada de proyectos para enviar a la Comisión Interinstitucional, como aportación vasca a los proyectos que puedan recibir fondos de la UE.

Con el objetivo de “no dejar a nadie atrás”, el Gobierno vasco reafirma “como herramientas esenciales” la reforma de la renta de garantía de ingresos, la adecuación y mejora de la educación de acuerdo con la comunidad educativa, la extensión del derecho a la vivienda y la defensa de la igualdad entre hombres y mujeres.