Gracia Querejeta & Nathalie Poza contra la invisibilización de las mujeres
CADA JUEVES, en la ficción de Invisibles, tres amigas se encuentran en un parque y pasean. Entre los susurros de los árboles y la luz de la mañana, dan rienda suelta a sus miedos, sus sentimientos y su soledad. Se encuentran perdidas en la vida y en esos 10 días de caminatas se buscan las unas a las otras para poder salir del bucle de sus vidas.
La directora de la película, Gracia Querejeta, de 57 años, y la actriz Nathalie Poza, a punto de cumplir 48, se han encontrado por primera vez en este filme, un retrato de la mujer de verdad, en el que también trabajan Adriana Ozores (60) y Emma Suárez (55), y que se estrenó el 6 de marzo. Hoy, directora e intérprete pasean por el Retiro madrileño y confiesan su identificación con muchas de las reflexiones y vivencias de las que hablan las tres amigas del filme. Las dos conversan del miedo a la soledad y se reconocen como mujeres invisibles.
"Es una realidad que conozco y en la que me reconozco. He querido contar más que verdades, sensaciones y sentimientos. Hablo de mujeres que están a mi alrededor y forman parte de mi mundo", asegura Querejeta, mientras Nathalie Poza resalta el conflicto personal por el que atraviesa cada una de ellas. "No tienen armas para combatir ese estado, no encuentran el modo en el que quieren vivir", explica la intérprete, que se ha enfrentado a un personaje "aterrorizado y muy demandante", para quien la amistad está por encima de todo. "Me ha hecho reflexionar mucho sobre mi vida privada. Yo me enganché a una pareja al límite y ahora miro para atrás y pienso cómo pude aguantar eso", añade Poza. Es Invisibles una historia de palabras y amistad, una terapia de mujeres al exterior, de la que ya se prepara una serie para televisión.
