Es la electrónica, estúpido
La música electrónica lleva años despertando pasiones (y moviendo mucho dinero). Los festivales de música de España no han querido quedarse fuera de esta tendencia
Baile. Euforia. Libertinaje. Y amanecer. ¿Quién no ha vivido una sesión de música electrónica a las seis de la mañana? La sensación del mañaneo no tiene precio. O sí: la temporada 2017/2018, la música electrónica generó un movimiento en el mundo de 7.300 millones de dólares (unos 6.200 millones de euros), según datos del International Music Summit. Pero ¿qué hay de la situación en España?
Un gran número de festivales nacionales abogan por la presencia de reconocidos djs. Sin ir más lejos el Primavera Sound ha contado con algunos de ellos. Intercalando a los de aquí con los de fuera, este festival es un claro ejemplo de cómo apostar por lo nacional sin dejar de lado nombres significativos del panorama internacional. Es el caso de John Talabot (Barcelona), Dj Python (EUA), Dj Koze (Alemania) o Dj Coco (Barcelona), todos ellos presentes en la edición de este año.
El Primavera tiene una sección dedicada a la música electrónica: Primavera Bits, que desde hace dos años se ha convertido en un oasis para los amantes del género. En el escenario Desperados Club, un espacio abierto a playa que ha acogido sesiones de electrónica, techno y house, se han podido ver, entre otros, a Mano Le Tough, Daphni, Marcel Dettman, Hivern Discs o Donato Dozzy. Las sesiones arrancaban a las 18.30 y se prolongaban hasta el amanecer para fomentar el mañaneo. En una de ellas, los asistentes llegaron al escenario en un catamarán animado por el Dj Daniel Kyo. Sin duda, el Primavera Beats ha aumentado la presencia de djs en este festival, que este año ha atraído a medio centenar de djs de todo pelo.
“Siempre hemos contado con djs en el festival", apunta Aleix Ibars, miembro de la organización del Primavera, "de hecho el cabeza de cartel de la primera edición fue Armand Van Helden". "A medida que el festival ha ido creciendo, hemos ido aumentando la presencia de todos los estilos que abordamos. Pero el caso de la electrónica es especial porque en 2016 creamos Primavera Bits, donde se concentra lo electrónico. Además, este estilo sigue presente en el resto de escenarios", añade Ibars.
Al echar un vistazo a anteriores ediciones del Primavera, se ve que lo electrónico ha ido creciendo. Exceptuando a clásicos del festival, como Dj Coco, John Talabot o James Blake, y añadiendo la presencia puntual de otros, los carteles no se caracterizaban por la notable presencia de djs. Pero ahora gozan de gran presencia. Este hecho se daba en la mayoría de los festivales de música (exceptuando los especializados en electrónica, claro). Por ejemplo, es el caso del BBK Live de Bilbao: si en 2015 contó con tres djs, este año tendrá ocho (entre ellos Hal9000 y Modeselektor). Algo parecido ha pasado en el Arenal Sound.
El auge del EDM (Electronic Dance Music) ha propiciado, además, una influencia notable sobre el pop: "cada vez más estrellas han recurrido a djs para llevar a cabo éxitos caracterizados por incluir beats electrónicos", según un artículo del Music Business Journal de la Universidad de Berklee. Un claro ejemplo de esto es el de Beyoncé, quien para su sencillo Run the World (del álbum Girls, del 2011) utilizó partes de una canción de Major Lazer.
El aumento exponencial de la música electrónica no solo ha sido impulsado por los festivales sino también por el streaming, según el estudio de International Music Summit. Este medio ocupa el primer puesto de difusión en países como Reino Unido y el segundo en Estados Unidos. Y una cifra que se dispara en España justamente por la aparición de nuevos festivales, alcanzando el 33% de la población. La pregunta que asoma parece evidente: ¿seguirá la música electrónica respondiendo a esa misma lógica durante los siguientes años? Todo parece apuntar a que sí.
