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Valentino, el ‘emperador’ del buen vivir

El diseñador italiano presenta en Nueva York un libro sobre recetas y cómo decorar una mesa con estilo

Andrea Morales Polanco
El diseñador Valentino Garavani junto a Anne Hathaway en Nueva York.
El diseñador Valentino Garavani junto a Anne Hathaway en Nueva York.Cordon Press

Amante de lo bello, perfeccionista, un poco obsesivo y además apasionado del buen comer, así es Valentino Garavani (Voghera, 1932). El reconocido diseñador italiano lanzó este mes su libro En la mesa del emperador, uno de las publicaciones sobre gastronomía más glamurosas que sin duda alguna se han publicado."Si me hubieran dicho alguna vez que publicaría un libro de recetas, yo habría contestado: 'No, esto es demasiado", declaraba Garavani una entrevista a la página web style.com Ayer el diseñador presentó en Nueva York su libro, nueve días después de haberlo hecho en Londres. La actriz Anne Hathaway no se quiso perder ninguno de los dos lanzamientos y acompañó al diseñador en los los dos eventos, uno a cada lado del Atlántico, demostrándole una vez más el cariño y respeto que le guarda.

Prosper y Martine Assouline propietarios de la editorial Assouline junto a Valentino en Nueva York.
Prosper y Martine Assouline propietarios de la editorial Assouline junto a Valentino en Nueva York.Cordon Press

El tomo, de 192 páginas y 80 fotografías, invita a los lectores a introducirse en el refinado mundo de Valentino. “Siempre me fijo en que los vegetales sean orgánicos. Nada de azúcar ni leche en los pasteles”, reveló el modista. La publicación no es simplemente un recetario que expone algunos de los menús preferidos del diseñador, también ofrece una ojeada a las costumbres de mesa del italiano. Enseña desde cómo hacer un flan de queso de cabra hasta cómo convertir un tomate en un pétalo de flor. Pero además, revela su obsesión por los adornos y centros de mesa.

“Hacerlo solo de recetas era ridículo”, reconoce, “sobre todo cuando una de las cosas más importantes es la presentación de la comida”, ha segurado Valentino en style.com. El diseñador confiesa que cuándo finalizó el libro pensó en la gran cantidad de cosas que pone a la vez en una mesa. "La gente va a pensar que solo lo hago para mostrarlo en la publicación. Pero no es así, en realidad yo uso todas esas cosas siempre, incluso cuando estoy solo”.

Valentino firmando un ejemplar en el lanzamiento de 'En la mesa del emperador' en Nueva York.
Valentino firmando un ejemplar en el lanzamiento de 'En la mesa del emperador' en Nueva York.Cordon Press

En la mesa del emperador, de la editorial Assouline (a la venta por 150 dólares), se adentra, además, en las mansiones del diseñador. Gracias al recorrido fotográfico los lectores descubrirán que a Valentino le gusta decorar sus mesas con cisnes de porcelana de Meissen (la primera porcelana de Europa) y cristal Moretti, así como su afición por los saleros zaristas —la procedencia de cada objeto está cuidadosamente enumerada en los pies de foto—. La colección de estas piezas es quizá tan extravagante como los 175 tarros de galletas del artista Andy Warhol.

Como buen italiano, no podía faltar la mención a la mamma italiane. Valentino hace un pequeño repaso de su infancia y recuerda a su madre quien, según él, era una buena cocinera pero que tenía un pequeño defecto: aprovechaba las sobras, y las volvían a servir al día siguiente. Algo que Valentino jamás hace.

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