Notas de Selectividad 2022 por comunidades: los aprobados rozan el 96%

Casi el 96% de los alumnos que se han presentado este 2022 a la convocatoria ordinaria de las pruebas de acceso a la universidad han aprobado, según las cuentas hechas por este periódico a partir de los datos provisionales (antes del proceso de reclamación) difundidos por las comunidades autónomas y las universidades públicas. Estas cifras pueden variar ligeramente al alza después de las revisiones de exámenes, pero de momento arrojan unos resultados muy parecidos a los recopilados el año pasado en este mismo punto del proceso: entonces, el porcentaje de aprobados fue del 95,90% y esta vez, del 95,93%.

Este ha sido, de hecho, el tercer y último año en el que la Selectividad tiene un formato simplificado por el contexto de pandemia, gracias al cual los estudiantes tienen un mayor margen para elegir las preguntas que quieren contestar. El año que viene se volverá previsiblemente al modelo anterior, sin suavizaciones, pero al siguiente, en 2024, está previsto que llegue un sistema distinto de pruebas, aún por determinar, pero adaptado al sistema de enseñanza por competencias (menos memorístico) que trae la reforma educativa que se está poniendo en marcha.

De momento, la convocatoria ordinaria de la Selectividad afectada por los últimos coletazos de la pandemia ha arrojado unos resultados que van desde el 92,92% de aprobados en Canarias hasta el casi pleno de La Rioja, con un 99,36% de alumnos aptos. Casi seis puntos y medio de diferencia entre comunidades (las diferencias medias del último lustro han estado entre los 6,33 puntos de 2019 y los 8,74 de 2020), que colocan en medio a la mayor parte de autonomías en una apretada franja que va del 96,22% de Andalucía y el 97,77% de la Comunidad Valenciana.

A la espera de los datos definitivos tras los periodos de revisión de exámenes, las cifras de este año se parecen mucho a las del anterior, lo cual tiene cierta lógica porque el contexto ha sido muy parecido por las medidas sanitarias desplegadas por la pandemia de covid, el formato simplificado de las pruebas y el hecho de que el número de alumnos procedentes de Bachillerato que se han presentado a la fase general de las pruebas ha sido muy similar: fueron 211.982 en 2021 y han sido ahora 211.300.

Muchos menos, en todo caso, que en 2020, cuando realmente se levantó la mano a la hora de evaluar porque los bachilleres vieron suspendidas las clases presenciales, en el peor momento de la pandemia, durante varios meses del curso. Entonces se presentaron casi 226.000, una cifra inédita a la que solo se acercan la de algunas convocatorias de los años noventa del siglo pasado. Una convocatoria masiva, pues, con una preparación lastrada por la crisis sanitaria, en la que descendió ligeramente la tasa de aprobados, aunque menos de lo que venían anunciando los peores augurios. Fue el 93,54%, después de más de un lustro en el que porcentaje se había movido entre el 94,2% y el 95,88%.

En cuanto a la evolución por comunidades, las más estables en sus resultados son el País Vasco y la Comunidad Valenciana, cuyo porcentaje de aprobados ha oscilado en una horquilla de menos de dos puntos desde 2017. Y en el extremo opuesto están La Rioja –que se suele estar por encima del 98%, pero en 2020 bajó hasta el 92,65%– y Canarias, cuyos resultados han bajado considerablemente en los últimos cursos.

En las próximas semanas, el Ministerio de Educación prevé tener el esqueleto de la nueva Selectividad que baraja entre sus objetivos homogeneizar unas pruebas que han sido fuertemente criticadas en los últimos años por las diferencias de resultados entre comunidades, que son las que redactan con sus universidades los exámenes de las pruebas. Una diferencias de resultados que van más allá de los aprobados, pues las notas medias, que es lo que realmente condiciona la entrada en las carreras más demandadas, también presentan grandes disparidades.

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