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Empresas
Análisis
Exposición didáctica de ideas, conjeturas o hipótesis, a partir de unos hechos de actualidad comprobados —no necesariamente del día— que se reflejan en el propio texto. Excluye los juicios de valor y se aproxima más al género de opinión, pero se diferencia de él en que no juzga ni pronostica, sino que sólo formula hipótesis, ofrece explicaciones argumentadas y pone en relación datos dispersos

El dueño de Patagonia revoluciona la filantropía: un hombre para un mundo mejor

La decisión de Yvon Chouinard de donar la empresa de ropa deportiva a un fideicomiso para luchar contra el cambio climático pone en evidencia las estrategias de los fondos socialmente responsables

Yvon Chouinard, fundador de Patagonia, durante un acto público en Nueva York en 2019.
Yvon Chouinard, fundador de Patagonia, durante un acto público en Nueva York en 2019.Ben Gabbe (Getty Images for Tribeca X)

Si hubiera más Yvon Chouinards, los seres humanos podrían luchar mejor contra el calentamiento global. Estos sentimientos circulan por las redes sociales desde que el fundador de Patagonia revelara el miércoles pasado que ha cedido el control de su empresa de ropa para deportes al aire libre. Su motivo: canalizar los beneficios generados por lo que seguirá siendo una empresa con ánimo de lucro hacia una organización benéfica que lucha contra los riesgos climáticos y medioambientales y que poseerá la práctica totalidad de las acciones de Patagonia. Sin embargo, podría haber conseguido un mayor fondo de reserva más rápidamente si hubiese vendido la empresa. Que no lo haya hecho es una respuesta adecuada a la alternativa de desligar los aspectos medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG).

La idea de esta separación ha ido ganando adeptos. Tiene su atractivo: alrededor de 17 billones de dólares en activos se encuentran en fondos dirigidos por gestores que dicen incluir consideraciones ESG en sus decisiones de inversión. Pero muchas veces no tienen clara la importancia relativa de cada una de ellas, y eso genera consternación y confusión. Un fondo ESG centrado en el clima probablemente debería ser el propietario de Tesla, por ejemplo, mientras que uno que dé prioridad a los resultados sociales o de gobernanza tendría dificultades para justificar esa inversión.

En la práctica, los tres aspectos deberían formar parte del análisis global de un gestor de fondos. No solo interactúan entre sí, sino que excluir o restar importancia a un tipo de rendimiento puede llevar a que se pasen por alto muchos riesgos y oportunidades. Chouinard, por ejemplo, quiere destinar más dinero a la protección del planeta. Sin embargo, al ceder prácticamente todas las acciones a un fideicomiso benéfico, está limitando su contribución a las ganancias anuales de la empresa de cerca de 100 millones de dólares al año. Patagonia, según múltiplos de empresas comparables, podría valer 2.000 millones, una suma considerable para invertir. Sin embargo, con este atajo correría el riesgo de vender la empresa a quienes no defienden ni su cultura ecológica ni a sus empleados.

PARA MÁS INFORMACIÓN: BREAKINGVIEWS.REUTERS.COM Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción es responsabilidad de EL PAÍS

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