Lenovo gana un 66% menos entre abril y junio por la caída en la demanda de ordenadores
En el segundo trimestre de 2023, que a su vez es el primer trimestre fiscal para la compañía, firmó un resultado de 191 millones de dólares
Lenovo, el mayor fabricante mundial de ordenadores, logró entre abril y junio un beneficio neto de 191 millones de dólares (175 millones de euros), un 66% menos que en el mismo periodo del ejercicio pasado. Los ingresos de la compañía descendieron un 24% con respecto al mismo periodo del año pasado y se quedaron en 12.900 millones de dólares, algo más de 11.800 millones de euros. El segundo trimestre de 2023 es para la compañía el primero de su año fiscal 2023/2024, por lo que el gigante chino comienza el nuevo ejercicio con unas cifras más tímidas que en el ejercicio anterior. Tras conocerse los resultados, la compañía con sede en Pekín sufrió un retroceso en Bolsa por encima del 3% y sus acciones, que habían abierto en los 7,78 dólares, llegaron a alcanzar un mínimo de 7,43. Al cierre del mercado en Hong Kong se quedó en los 7,66 dólares por título.
Por áreas de negocio, las ventas en su división de dispositivos inteligentes —que incluye ordenadores personales y teléfonos móviles y supusieron el 41% del total del grupo— descendieron un 28%, hasta los 10.260 millones de dólares (9.409 millones de euros). A esto se ha referido el presidente y consejero delegado, Yuanqing Yang: “En el trimestre pasado, el entorno macro presentó desafíos y nuestro negocio de hardware pasó por una fase de ajustes”. Por otro lado, señaló que los ingresos en las áreas no relacionadas con los ordenadores personales habían crecido y se mostró “cautelosamente optimista” acerca de la recuperación del ámbito del hardware. “Confío en la posición a largo plazo para ofrecer rentabilidad sostenible y crecimiento en el futuro”, concluyó.
En cuanto al área de soluciones y servicios, la facturación en el trimestre aumentó un 17,6%, hasta 1.713 millones de dólares (1.571 millones de euros), mientras que el negocio de infraestructuras retrocedió: ingresó 1.914 millones de dólares (1.755 millones de euros), un 8,2% menos.
En las cuentas publicadas este jueves, la compañía explica que opera en 180 mercados de todo el mundo. Por áreas geográficas, los ingresos disminuyeron en todas las regiones: en América decrecen un 21%, en Asia-Pacifico un 17%, en Europa, Medio Oriente y África (EMEA) retroceden un 29% y en China, un 29%. Pese al retroceso, Lenovo señala que de cara al futuro su negocio de PC “se está estabilizado”. Esta estabilidad responde a un ajuste después de que en la pandemia se disparase la compra de ordenadores personales. Por ejemplo, en 2021, se vendieron 341 millones de unidades, lo que supuso el mejor año desde 2012. “El mercado global de PC está retrocediendo a los niveles anteriores a la pandemia en el corto plazo, pero en el largo plazo podría permanecer en un nivel estructuralmente más alto que el anterior a la Covid”, concluyen.
Entre las razones para el optimismo, la compañía china destaca que el precio de los componentes con los que fabrican sus productos “está tocando fondo” y cree que la demanda de dispositivos “retornará a la senda del crecimiento” durante la segunda mitad de su ejercicio fiscal. Por otro lado, los gastos operativos disminuyeron un 11% interanual debido, según la multinacional, a la reducción del gasto en publicidad y promoción (-60 millones de dólares) y en investigación y pruebas (-45 millones de dólares), entre otras.
Inteligencia Artificial
El aumento de las partidas destinadas a introducir nuevos mecanismos de inteligencia artificial (IA) es una constante en todas las compañías tecnológicas. Así, Lenovo ha anunciado que, durante los próximos tres años, llevará a cabo una inversión adicional de 1.000 millones de dólares (917 millones de euros) para IA. Se centrará en la creación de dispositivos que integren esta tecnología, en el diseño de infraestructura informática preparada y optimizada, así como en la producción de contenido generado por IA y centrado en mejorar la productividad de los usuarios. “Para satisfacer las necesidades de las nuevas cargas de trabajo generativas de IA, el PC también deberá transformarse en un PC con IA”, ha indicado la empresa.
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