Uno de los mayores bancos de Austria ofrecerá criptomonedas a sus clientes a través de Bitpanda
El Raiffeisenlandesbank se convertirá en la primera entidad tradicional de la UE a través de la cual será posible comprar y vender bitcoins, ethereums y otras divisas digitales
Las criptomonedas nacieron como un desafío al sistema financiero tradicional, repleto de intermediarios que los partidarios de las monedas electrónicas consideraban prescindibles ante la llegada de una nueva tecnología llamada a cambiarlo todo. Sin embargo, más de 14 años después del nacimiento del bitcoin, su fusión con las finanzas de toda la vida parece más cercana que nunca: la plataforma Bitpanda ha anunciado este martes un acuerdo con el Raiffeisenlandesbank, una de las mayores entidades de Austria, para que esta incorpore a su oferta la compra y venta de activos digitales.
El pacto no supone que sus clientes vayan a poder iniciar las transacciones de manera inmediata, pero sí un compromiso de que sucederá próximamente, un paso de gran simbolismo al tratarse del primer banco tradicional de la UE —con 100 años de historia, sucursales, y no solo digital— en añadir a su cartera un producto tan volátil como controvertido, con defensores y detractores igualmente acérrimos.
Otras entidades sin presencia física, como N26, ya se han adentrado en esa senda, nada sencilla por los recelos de los reguladores, que ven peligrosa una eventual interconexión entre las criptomonedas y el sistema financiero, cuando no contraproducente —Fabio Panetta, del BCE, pidió tratarlas como a juegos de azar—. La visión de Lukas Enzersdorfer-Konrad, CEO adjunto de Bitpanda, es muy distinta. Para él, se trata de una cuestión evolutiva, imparable. “Los activos digitales ya no son el futuro, son el presente. Es algo parecido a internet o los teléfonos móviles. Al principio había gente escéptica porque los inicios de las tecnologías son algo incómodo, complicado y desconocido. Pero igual que hoy nadie duda de las ventajas de un correo electrónico frente a una carta o el fax, lo mismo ocurre ya con los activos digitales”.
Las criptomonedas están aún muy lejos de estar tan extendidas. Su mayor exponente, el bitcoin, atraviesa un buen momento después de un 2022 para olvidar, cuando los escándalos por la bancarrota de FTX, y los colapsos de TerraLuna, Three Arrows Capital o Voyager Digital espantaron a los inversores y alentaron las dudas sobre su futuro. Pero hay quien ve en esas montañas rusas emocionales de subidas y bajas un impedimento para que las criptomonedas se hagan hueco, dada su extrema volatilidad.
En un principio, el Raiffeisenlandesbank planea comenzar a ofrecer este servicio solo en su división en Viena y la Baja Austria, RLB NÖ-Wien. “El acuerdo con Bitpanda pretende ampliar nuestra gama de productos con una faceta innovadora y segura”, sostiene su consejero delegado Michael Höllerer. Pese al prefijo que incorpora en su nombre, Bitpanda, fundada en 2014, cuya sede central también se encuentra en Austria —y está presente en España—, no es una plataforma exclusivamente de criptomonedas. Sus clientes también operan con acciones, materias primas o metales como el oro.
El acuerdo con RLB NÖ-Wien llevará al banco a implantar la infraestructura de trade SaaS de Bitpanda en su sistema. La plataforma confía en que no sea el último en hacerlo. Auguran una mayor adopción de las criptomonedas, y que eso les ayude a crecer, con más entidades imitando al banco austriaco, especialmente ahora que la UE ha aprobado MiCA, una regulación que trata de mejorar la protección a los usuarios cripto y a la vez proporciona más seguridad jurídica al sector. Enzersdorfer-Konrad, CEO adjunto de Bitpanda, reconoce más contactos. “Estamos hablando prácticamente con todos los bancos en Europa y fuera, y explorando las formas de colaboración. Para nosotros, tener una amplia gama de opciones no es nunca algo negativo para el inversor”.
No habrá cantidad mínima a partir de la cual los clientes de RLB NÖ-Wien podrán invertir en criptomonedas. Esa sencillez abre la puerta a que más clientes experimenten con ellas por primera vez, pero también plantea el dilema de si quienes se lanzan a ellas disponen de la suficiente educación financiera como para entrar en ese complejo universo con garantías.
El Raiffeisen Bank International, matriz del banco que ha llegado al acuerdo para ofrecer criptomonedas a sus clientes, ha estado en las últimas semanas en el ojo del huracán por las presiones que está recibiendo del Banco Central Europeo para que abandone Rusia. La entidad sigue operando en el país pese a la invasión de Ucrania decidida por Moscú y la oleada de sanciones occidentales que ha comportado, y no se unió a la desbandada de empresas europeas que dejaron Rusia.
Sigue toda la información de Economía y Negocios en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.