_
_
_
_
_

El Gobierno cerrará la legislatura con una subida acumulada del salario mínimo de casi el 50%

España, entre los países de la UE que más han subido el SMI desde finales de 2018, según Eurostat. Eurofund constata que los Estados miembros aceleraron las revalorizaciones de los sueldos más bajos para combatir la inflación

La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, con los líderes de CC OO, Unai Sordo (a la izquierda), y UGT, Pepe Álvarez, el martes en Madrid.Foto: EUROPA PRESS | EPV
Jesús Sérvulo González

El Gobierno de coalición que preside Pedro Sánchez enfila el último año de una legislatura en la que habrá subido el salario mínimo interprofesional (SMI) en 344 euros, lo que supone una revalorización del 47%, desde los 735,9 euros en los que estaba a finales de 2018 hasta los 1.080 que alcanzará en 2023, después de que el próximo martes el Consejo de Ministros apruebe la subida con carácter retroactivo desde el pasado 1 de enero. El aumento del salario mínimo se ha acelerado en los últimos años. El Ejecutivo formado por PSOE y Unidas Podemos ha hecho hincapié en la necesidad de mejorar las condiciones laborales de los que perciben un sueldo más bajo. Así, nada más llegar a La Moncloa, el Gobierno de Sánchez dio luz verde a una subida del SMI del 22,3% para 2019, que animó a los centros de estudios a analizar las consecuencias de este incremento sobre el mercado laboral.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, comparece en un pleno del Senado, a 31 de enero de 2023, en Madrid (España).

“Se trata de un acuerdo bipartito (entre Gobierno y sindicatos) que se ha alcanzado en el marco del diálogo social”, defendió ayer la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. “Es importantísimo, porque el SMI se ha incrementado un 47% desde que llegamos al Gobierno”, añadió tras conocerse el alcance de la subida del SMI. “El salario mínimo”, dijo la titular de Trabajo, “es la herramienta más eficaz contra la pobreza salarial y la mejor herramienta para la igualdad retributiva entre hombres y mujeres”. La ministra calculó que esta brecha salarial entre sexos se reduce en un 3,7%, al tiempo que mejora la calidad del empleo joven, incidió.

España se suma así a la tendencia europea de aprobar fuertes incrementos de los salarios mínimos legales para contrarrestar el golpe de la inflación. Letonia (24%), Rumania (17,6%), Polonia (16,2%), Lituania (15,1%), Hungría (14,9%), Alemania (14,9%), Serbia (14,5%), Croacia (12,5%), Estonia (10,9%), Albania (10,8%), Países Bajos (10,1%), Bulgaria (9,9%), República Checa (9,5%) y Eslovaquia (8,4%) son los países que junto a España (8%) más han subido el SMI durante 2023, según los datos disponibles de la oficina estadística europea (Eurostat) para el primer semestre de este año con datos actualizados y pendientes de que el Consejo de Ministros de España apruebe definitivamente la subida. Países como Grecia aún no han revalorizado el SMI, pese a anunciar que lo está estudiando. Otros como Francia lo han aumentado un 3,9%; Irlanda, un 7,6%, o Portugal, un 7,8%.

Si se amplía la perspectiva a lo ocurrido en los últimos cuatro años, se puede ver cómo España es, dentro de los grandes países de la UE, el que más ha incrementado el salario mínimo, un 47%. Lituania, sin embargo, es el que más ha revalorizado sus sueldos más bajos desde finales de 2018, con una subida del 110%. Serbia (84,9%), Polonia (55,3%), República Checa (53%), Bulgaria (52,9%), Croacia (50,3%) o Rumania (48,8%) son los otros países que más han elevado la remuneración legal más baja.

“A pesar de que los aumentos nominales en los salarios mínimos legales alcanzaron un máximo histórico entre enero de 2022 y enero de 2023, los trabajadores con salario mínimo en la mayoría de los países de la UE están viendo cómo su poder adquisitivo disminuye o casi se ve compensado, según las cifras preliminares de inflación”, señala un reciente informe del think tank europeo Eurofund, que también ha analizado los datos comparables sobre salarios mínimos. Sus cifras muestras algunas variaciones respecto a las de Eurostat porque incluye las subidas que algunos países aprobaron ya comenzados 2022 y las de 2023, así que la tasa de crecimiento de este año tiene en cuenta ambos aumentos. Los precios aumentaron en España un 8,4% de media durante el año pasado. Diciembre cerró con un IPC del 5,8% interanual. En Europa la situación no fue muy distinta, la eurozona cerró el año con una inflación del 9% interanual. Por eso, Eurofund añade: “Dado que es previsible que la inflación persista, se puede esperar una mayor depreciación de los salarios mínimos en términos reales en la mayoría de los Estados miembros, ya que solo unos pocos prevén aumentos adicionales durante el resto de 2023″.

Fuentes del Gobierno de España descartan nuevas subidas del SMI hasta la próxima legislatura. Recuerdan que se han aprobado cinco subidas en los últimos años hasta alcanzar el 60% del salario medio español, como marca la Carta Social Europa. Ese era el objetivo que los socios que integran el Ejecutivo se habían marcado en el acuerdo de investidura para alcanzar esta legislatura.

Los países europeos han seguido la recomendación de las principales instituciones internacionales. Tanto el FMI como la OCDE han recomendado subir los salarios a los que menos cobran. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) aconsejó hace un par de meses subir el SMI para proteger a los más vulnerables del golpe de la inflación. “Aunque la elevada incertidumbre y la ralentización del crecimiento económico pueden sugerir cautela a la hora de aumentar los salarios mínimos, en varios países de la OCDE existen márgenes para adaptar, al menos parcialmente, el nivel existente del salario mínimo legal con el fin de proteger a los trabajadores más vulnerables del aumento de los precios”, señalaba el organismo, que advertía: “Es importante considerar detenidamente los efectos económicos y sociales de los ajustes de los salarios mínimos y consultar a los interlocutores sociales y otras partes interesadas”.

Pérdida de poder adquisitivo

El director ejecutivo de Eurofound, Ivailo Kalfin, explica sobre los datos analizados por esta agencia europea: “Nuestro análisis inicial, basado en los datos de inflación armonizados disponibles, indica que solo en unos pocos países los trabajadores que perciben salarios bajos percibirán un aumento significativo del poder adquisitivo como resultado de los aumentos en los salarios mínimos nominales”. El responsable de esta agencia europea recuerda que la inflación está subiendo más en algunos países de lo que lo están haciendo los salarios más bajos, lo que provoca una pérdida de poder adquisitivo. “Si bien se reconoce que los aumentos en los salarios mínimos en este nivel no tienen precedentes en varios Estados miembros, se debe seguir trabajando para apoyar a los trabajadores con salarios bajos en este momento de inflación creciente, a través de todos los mecanismos disponibles”, añade Kalfin.

La agencia europea para la mejora de las condiciones de vida y del trabajo explica en un artículo que la fijación del salario mínimo tuvo lugar a la sombra de los altos niveles de inflación, que afectaron duramente a los Estados miembros de la UE en 2022. Es decir, que para proteger los ingresos de los peor pagados empleados, la mayoría de los gobiernos han aumentado los salarios mínimos mucho más que en los años anteriores.

Los aumentos son mucho más altos que el año pasado, e incomparablemente más altos que los años anteriores, según Eurofund. En los Estados miembros, el incremento nominal medio en 2023 es del 12% frente al 6% aproximadamente del año pasado (entre enero de 2021 y enero de 2022).

En general, dice la agencia europea, los salarios mínimos han aumentado más entre los Estados miembros centrales y orientales, lo que marca una continuación de la convergencia al alza de la UE durante muchos años. Letonia aumentó su salario mínimo en casi un 25% en 2023 (después de haberlo congelado desde enero de 2021). Además, de los 13 países con los mayores aumentos, 10 son Estados miembros que se incorporaron a la UE después de 2004.

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Sobre la firma

Jesús Sérvulo González
Redactor jefe de Economía y Negocios en EL PAÍS. Estudió Económicas y trabajó cinco años como auditor. Ha cubierto la crisis financiera, contado las consecuencias del pinchazo de la burbuja inmobiliaria, el rescate a España y las reformas de las políticas públicas de la última década. Ha cursado el programa de desarrollo directivo (PDD) del IESE.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_