Llegan menos turistas pero gastan más: el desembolso de los visitantes extranjeros se disparó en Semana Santa

El sector turístico coge aire. Tras más de dos años en los que buena parte de las empresas han vivido gracias a la respiración asistida de las ayudas públicas, parece que 2022 será por fin el de la vuelta a la normalidad. O a algo parecido. Esa es la sensación que reina en las calles —y las playas— de España en la antesala del verano, la temporada alta por excelencia. El mejor ejemplo fue la pasada Semana Santa, cuando se vieron imágenes de afluencia de viajeros como las previas al coronavirus. Y los datos de abril publicados este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE) así lo corroboran. Especialmente en la partida del gasto: los viajeros foráneos desembolsaron 6.900 millones de euros, solo un 2% menos de lo que se gastó en total en el mismo mes de 2019 (7.056 millones) a pesar de que entonces hubo un millón más de visitas.

En cuanto a la afluencia de viajeros, el sector sigue algo por debajo de las llegadas de antes de la crisis del coronavirus. En el cuarto mes de este año —que es comparable con 2019 porque la Semana Santa ese año también cayó en abril— visitaron el país 6,1 millones de turistas extranjeros (un 14,6% menos que en 2019, antes de la pandemia, cuando lo hicieron 7,15 millones). Es decir, se ha incrementado de forma notable el gasto por viajero —ha pasado de 987 euros en 2019 a los 1.131 euros de abril de este año—, lo cual aproxima el objetivo del sector de lograr un turismo de calidad que consuma más en el destino.

Esta meta se ha conseguido en realidad gracias a una duración media de los viajes superior a la de antaño. Antes de la pandemia los visitantes foráneos pasaban en España de media 6,4 días, mientras que en 2022 han alargado su estancia casi un día más (hasta los 7,3 días). Esta ha sido la clave para lograr casi igualar el dato de gasto prepandemia, y mantener la alta duración de los viajes será el gran reto para el futuro. De hecho, el gasto medio diario por persona se ha estancado: ha crecido ligeramente de los 154 euros de 2019 a los 155 euros de este abril.

Otro dato interesante que se extrae de la estadística del INE es el gasto de los turistas si se excluye lo pagado por el transporte: 5.140 millones este abril, un 2% superior a los 5.033 millones del mismo mes de 2019, según explica el lobby turístico Exceltur. Una cifra relevante, ya que en muchos casos el desembolso por el transporte se realiza en el país de origen y no en destino. Además, lo que repercute en el lugar de vacaciones es principalmente lo que se consume durante la estancia y no lo que se abona para llegar allí. “Viene menos gente y se deja más dinero, lo que es una aspiración en muchos destinos en España”, reconoce José Luis Zoreda, vicepresidente de Exceltur, que marca el punto de inflexión en la pasada Semana Santa. “Se ha disparado la demanda de una forma insólita. Todavía estamos algo por debajo de 2019, pero la tendencia está consolidándose”, argumenta.

Brecha en el acumulado del año

La comparación con el año pasado muestra un vigor muy fuerte en la recuperación, aunque es algo engañosa: en el cuarto mes de 2021 España estaba sumida en un estado de alarma que limitaba los viajes entre comunidades autónomas. Más incluso si se compara con 2020, en pleno confinamiento y con un turismo nulo. Pese a ello, los datos de abril de este año son notables. También porque se consiguen a pesar de las turbulencias que persisten por el coronavirus, el fantasma de la inflación y la inseguridad por la guerra de Ucrania.

En el acumulado del año, si se mira respecto a los datos de antes de la pandemia, se vislumbra que todavía falta por recuperar un cuarto del sector en las llegadas (15,8 millones, por debajo de los 21,4 millones que visitaron el país en los cuatro primeros meses de 2019). Mientras que el gasto se ha repuesto algo más, aunque sigue un 16% por debajo (18.753 millones respecto a los 22.428 millones del año previo a la covid).

Por países de origen, el Reino Unido se mantiene como el principal emisor: llegaron desde las Islas 1,2 millones de personas en abril. Le siguen los residentes en Alemania (casi un millón de viajeros) y los de Francia (aportó algo más de 800.000 viajeros). La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha ensalzado en un comunicado la importancia de estos datos. “La Semana Santa ha consolidado la rápida e intensa reactivación del sector turístico, superando nuestras propias expectativas. Además, estamos recibiendo turistas que permanecen más tiempo en nuestro país y, como consecuencia, gastan más en su viaje, lo que indica que estamos avanzando hacia un modelo turístico de mayor calidad y más rentable. A pesar de la incertidumbre de la guerra y sus consecuencias, España está entre los destinos internacionales preferidos para viajar y nuestras previsiones para la temporada de verano indican que recuperaremos los niveles prepandemia”.

Canarias supera sus datos prepandemia

Canarias destaca entre los destinos españoles. Fue la segunda autonomía más visitada (por detrás de Cataluña), pero en su caso ya ha superado el número de llegadas de viajeros de 2019: este abril visitaron las islas 1,11 millones de turistas, mientras que en el mismo mes del año previo a la pandemia lo hicieron 1,10 millones. Tras el archipiélago canario, Baleares se quedó a las puertas de recuperar su nivel precovid. La visitaron 1,07 millones de viajeros, ligeramente por debajo de los 1,08 millones del cuarto mes del ejercicio previo a la crisis del coronavirus.

Por número de turistas que llegaron al territorio, Cataluña fue la que más recibió: casi 1,16 millones, un 30% por debajo de los que acogió en el mismo mes de 2019. Le siguieron Canarias, Baleares, Andalucía (907.596 viajeros), Comunidad Valenciana (783.987) y la Comunidad de Madrid (545.975).

Con estas cifras y el acelerón en la demanda turística, la previsión para 2022 es que se recupere la mayor parte de la actividad que había antes de la pandemia. “Estimamos que para final de año se recuperaría un 92% del PIB turístico. Sin embargo, con las ganas de viajar que se ven desde Semana Santa, creo que estamos cada vez más cerca de igualar si no superar lo registrado en 2019 en actividad económica del sector”, zanja Zoreda. Pese a ello, no sopla el viento a favor en todos los sentidos, como matiza el propio vicepresidente de Exceltur. Esta mejora no se trasladará de igual forma a los márgenes y cuentas de resultados de las empresas por el incremento de los costes galopantes que se ha experimentado. “Se ha recuperado la demanda más veloz de lo previsto, pero no todos pueden repercutir en el precio la subida de los costes”.