Ventana a la ventana
El alcance destructivo del iPad parece estar extendiéndose más lejos y más rápido. El miniordenador táctil de Apple se está vendiendo a una velocidad vertiginosa. Ahora, los analistas predicen que en 2011 se venderán hasta 40 millones. Con los ingresos y los gastos personales estancados, parece una situación de suma total cero en el sector de los aparatos electrónicos comerciales. Olvídense de los ordenadores personales y los miniportátiles. El iPad también se comerá las ventas de cámaras y dispositivos GPS.
Lo bien que le está yendo al aparatito de pantalla táctil quedará claro a finales de este mes, cuando Apple publique su próximo conjunto de resultados trimestrales. Pero hay cada vez más indicios de que la empresa está vendiendo muchos más de los que cualquiera fuera de Apple, o puede que incluso dentro del círculo cercano a Steve Jobs, hubiese podido imaginar. Está claro que el mercado de los miniordenadores portátiles se está ahogando. Las ventas de miniportátiles habían estado creciendo más de un 30% al año antes de que se desatase la fiebre del iPad. Ahora las ventas se están reduciendo, según la empresa de investigación de mercados NPD Group.
Pero el volumen de ventas del iPad significa que habrá más víctimas. Los primeros compradores de nuevos aparatos electrónicos comerciales suelen tener abundantes ingresos disponibles o gastan mucho en chismes, o ambas cosas. El iPad está dando muestras de estar extendiéndose más allá de esta base. Parece estar en camino de convertirse en el producto comercial más rápidamente aceptado de la historia. Y eso es realmente significativo, teniendo en cuenta que entre la competencia se encuentran el ubicuo reproductor de DVD y los superpopulares iPod y iPhone, de la propia Apple.
Sin embargo, con tantos iPad volando de las estanterías, es más que probable que no solo los estén comprando los ricos y los chiflados. En vez de eso, es fácil que un abanico más amplio de consumidores esté gastándose el dinero en iPad en lugar de en otros artilugios. Los analistas de Sanford Bernstein se han dado cuenta, por ejemplo, de que las ventas de cámaras digitales empezaron a caer en picado alrededor de la fecha en que salió al mercado el iPad. Y de hecho, las de televisores LCD llegaron a ser negativas.
Es posible que sea simplemente la debilidad de la economía la que esté reduciendo estas otras ventas de aparatos. Pero, cada vez más, el iPad de Apple parece el verdadero culpable. -
