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Cambre actuará contra Gas Galicia tras una explosión que obligó a desalojar un edificio

La rotura accidental de una tubería de suministro de gas, perforada por una excavadora que trabajaba en una zanja del paseo marítimo de O Temple, en Cambre (A Coruña), provocó ayer un incendio en el que resultaron heridos leves tres obreros y obligó a desalojar unos 25 residentes de un edificio alcanzado por las llamas. El accidente logró resolverse sin grandes daños gracias a la rápida intervención de bomberos, Protección Civil y la Guardia Civil. Pero pudieron producirse graves consecuencias por la tardanza, casi tres horas, de Gas Galicia en cortar el suministro de gas en la zona y evitar el escape, que alimentaba el fuego y acrecentó el riesgo de explosión.

El alcalde de Cambre, Antonio Varela, se mostró indignado "porque fallaron todos los controles de seguridad" y anunció la posibilidad de emprender acciones contra Gas Galicia por "su falta de planificación". Para el alcalde es inexplicable que los técnicos de la empresa no tuvieran planos sobre el trazado de la canalización, por lo que estuvieron durante tres horas tratando de localizar, bajo el asfalto y a ciegas, las tres válvulas que debían cerrar. "Deberían haber saltado de forma automática", se quejó Varela. Al final, según denunció el ayuntamiento, hubo que cerrar la red general de gas que abastece Cambre y Oleiros, dos municipios coruñeses con más de 60.000 habitantes.

El accidente ocurrió sobre las 9.20 horas, cuando los operarios de la empresa Cobra, una subcontrata de Unión Fenosa, perforaron accidentalmente una tubería de gas cuando excavaban una zanja. Un chispazo provocó de inmediato un incendio, cuyas llamas alcanzaron en altura el tercer piso del número 2 de la avenida de O Graxal. Los vecinos fueron rápidamente desalojados de sus casas, y se vivieron algunas escenas de tensión, dada la cercanía de una guardería y de más viviendas.

Tres operarios que trabajaban en la zanja donde se rompió la tubería resultaron heridos con quemaduras leves, mientras que dos bomberos, cuyo equipo tardó más de una hora en extinguir el incendio, de grandes dimensiones, tuvieron que ser atendidos por inhalaciones de gas. La excavadora quedó completamente calcinada por el fuego, que afectó también el portal y la fachada del edificio.

Dentro, hubo que ventilar porque se formaron bolsas de gas. Sobre las dos de la tarde, los vecinos, muchos en bata de casa y pijama ante la premura con la que fueron desalojados, pudieron regresar por fin a sus domicilios.

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