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El parque de Collserola previene los incendios con una cámara digital

El sistema analiza las gamas de colores y alerta si hay cambios bruscos

La dirección del parque de Collserola, en colaboración con una empresa alemana, prueba este verano un sistema de prevención de incendios que consiste en la vigilancia a través de cámaras digitales. Marià Martí, director del parque, puntualiza que "de momento, hay una cámara instalada en lo alto de una de las torres que tenemos distribuidas en las 8.400 hectáreas de bosque. Se trata de un dispositivo experimental que funciona en Alemania desde 2003".

Esta cámara, que puede captar cualquier posible incendio en un radio de 15 kilómetros, es capaz de crear fotogramas dotados de una amplísima gama de grises. El sistema analiza todos los fotogramas comparándolos entre ellos y, de este modo, si detecta la más mínima variación en la escala de grises de un fotograma con el anterior, envía una señal de radio a la central del Dispositivo de Prevención y Detección de Incendios del consorcio del parque.

Desde la central, un operario a través de su pantalla comprueba si, efectivamente, se trata de una alarma de incendio. Este paso no puede ser sorteado debido a que un cambio en la escala de grises puede también provocarlo la sombra de las nubes. De ahí que sus responsables destaquen la importancia de que un vigilane esté al cargo de supervisar las pantallas que emiten las imágenes captadas por las cámaras.

En la actualidad el sistema sólo es eficaz durante las horas con luz solar. Sin embargo, sus creadores ya están ultimando la forma para ampliar las horas de funcionamiento y esperan que a finales de este año, coincidiendo con la entrada del invierno, se pueda ampliar la vigilancia automática también a las horas nocturas.

Complemento de los vigías

Pero que nadie tema por su puesto de trabajo. El director del parque de Collserola, Marià Martí, insiste en que "este sistema no pretende sustituir la labor de los vigilantes; tan sólo complementarla". Las cámaras podrían resultar particularmente útiles para cubrir las horas que separan una guardia de un vigía con la siguiente. Desde el pasado 1 de mayo y hasta finales de septiembre, los vigías cumplen turnos desde las 10.00 horas hasta las 20.00 horas.

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Otra utilidad de las cámaras reside en colocarlas en los puntos con menos visibilidad de Collserola. Aunque en el parque existen siete torres de vigilancia, todavía quedan muchos puntos que no pueden ser avistados desde estas instalaciones debido a la complicada orografía del terreno. Las cámaras podrían suplir estas deficiencias.

Por ahora, el sistema de vigilancia por cámara digital le está saliendo gratis al consorcio gestor del parque de Collserola. Y es que la empresa alemana decidió ofrecer su sistema de vigilancia al parque como una prueba piloto. A finales de este año se valorará la conveniencia de extender este sistema de vigilancia a otras torres. Si el sistema resulta útil y eficaz en Collserola, la empresa distribuidora del sistema de seguridad piensa promocionarlo en el resto de países mediterráneos.

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