Los trabajadores de Sáez Merino inician una huelga indefinida y reivindican sus empleos en la calle
Los trabajadores del grupo textil Sáez Merino iniciaron ayer una huelga indefinida para exigir a la empresa que negocie los expedientes de regulación de empleo que baraja en sus conversaciones con bancos o acreedores para superar sus actuales problemas financieros y que todavía no ha presentado formalmente.
La primera jornada de huelga vino acompañada de concentraciones. A primera hora de la mañana, unos 300 trabajadores se reunieron frente al almacén logístico de la empresa en Quart de Poblet, según un portavoz de UGT.
Dos horas más se desplazaron hacia las oficinas centrales de la empresa, en el polígono industrial de Vara de Quart, en Valencia, donde se congregaron unos 500 trabajadores.
La protesta se extendió hasta la plaza del Ayuntamiento de Valencia, donde trabajadores de Sáez Merino distribuyeron pasquines entre los vecinos que asistieron a la mascletà a las dos de la tarde.
La huelga paró toda la actividad en las fábricas del grupo textil en Segorbe, Cheste, Benaguasil y Daimiel, según fuentes sindicales. Un 60% de los trabajadores del almacén de la firma en Quart de Poblet se sumó al paro.
Saéz Merino emplea a 950 trabajadores. A mediados de 2004 pactó el despido de 548 empleados, pero el fabricante de Lois o Caroche aún arrastra problemas.
