Puntualizaciones a Bennassar
Hace ya algún tiempo publiqué en Babelia una crítica del libro El infierno fuimos nosotros. La guerra civil española, obra de un excelente especialista en la España del Antiguo Régimen, Bartolomé Bennassar. Me responde con una "réplica" a la cual verdaderamente lamento tener que hacer unas puntualizaciones como las que siguen:
En la página 35 de su libro Bennassar textualmente escribe de Largo Caballero: "Fue elegido presidente del PSOE y posteriormente (sic) fue ministro de Trabajo de la República". Por mucho que ahora cite una enciclopedia como cobertura, Bennassar se equivoca de medio a medio, pues como todo el mundo sabe, Largo Caballero fue ministro de Trabajo en el primer bienio republicano desde el gobierno provisional en abril de 1931. Es más que un error, y ello explica la sucesión de inexactitudes en torno al socialismo español de la República, en especial en la página 31.
Admite Bennassar que en la página 284 se equivoca al situar a Togliatti en España, nada menos que de acuerdo con Victorio Codovilla, en la primavera de 1937 organizando "la desestabilización de Largo Caballero". Le parece que eso "no cambia nada en lo esencial". Pues sí cambia poner al "número tres" de la Comintern actuando al alimón con alguien cuya forma de actuar detestaba.
Último punto de la réplica. Como viene siendo habitual, cuando a un autor le critican por una afirmación diáfana, responde que el crítico no ha tenido en cuenta todo lo que dijo antes, sus cláusulas de cautela, etcétera. Mala fe del crítico, sin duda. Lo cierto es que en esa página 458 final Bennassar apunta explícitamente a una democracia popular a lo rumano o a lo polaco como consecuencia de una eventual victoria del Frente Popular en la guerra. Tiene razón al subrayar que no tengo en cuenta el resto de la página. En la crítica no cité su consideración de Negrín, "lo quisiera o no", como "representante" (sic) de los comunistas, ni la de "Santiago Carrillo, implicado en la matanza de Paracuellos", afirmación que como la falsa muerte del marido de Pasionaria no respalda con apoyo documental alguno. Bennassar protesta porque se considere su libro "sesgado". El lector juzgará.
