"Si puedo ayudar a Alonso, lo haré"

Para un hombre con su historial, aceptar la situación preponderante de su compañero de equipo no debe resultar nada fácil. Sin embargo, Giancarlo Fisichella comenta que su objetivo es siempre ganar carreras, pero que no echará balones fuera si puede ayudar de alguna forma a Fernando Alonso a conseguir el título mundial que está persiguiendo esta temporada. A sus 32 años, con 152 grandes premios en su espalda y con dos victorias a lo largo de su carrera, Fisichella no sólo mantiene intacta su ilusión por correr, sino que se siente arropado por el equipo Renault, a pesar de que tras su victoria inicial en Melbourne ha sufrido todo tipo de problemas, mientras observaba como Alonso se encaramaba en lo más alto de la clasificación.

"Sería un error que me dieran un trato peyorativo. Iría en detrimento del equipo"

Ahora, metido ya en el segundo tramo del campeonato, Fisichella entiende que su principal batalla no es ya por el título de pilotos, sino que su objetivo pasa por sumar el mayor número de puntos que pueda para dar a Renault el Mundial de marcas. "Siempre que tomo la salida en una carrera mi objetivo es ganar", asegura el piloto romano, que tiene la extraña marca de ser el único que ha ganado una carrera un viernes: fue el día que le comunicaron que se había impuesto en el GP de Brasil de 2003, después de que en el circuito los laureles de aquella carrera inacabada se los llevó Raikkonen. "Ésta sigue siendo ahora mi motivación. Lucharé para que el equipo pueda proclamarse campeón. Pero en el mundial de pilotos está claro que intentaré ayudar a Fernando

si lo necesita".

Eso no significa que Fisichella haya recibido órdenes de equipo en este sentido. Es simplemente un acto de responsabilidad personal. "Lo que intentan en el equipo", afirma el piloto que el año pasado concluyó todas las carreras menos una corriendo con Sauber, "es ofrecernos tanto a Fernando como a mí dos coches competitivos". "Sería un error estratégico que me dieran un trato peyorativo, porque todo ello iría en detrimento de los intereses del propio equipo", prosigue. Sin embargo, un simple vistazo a los resultados de la temporada delatan que todos los problemas técnicos y humanos del equipo se han cebado con él y han respetado a Alonso. "Es sólo que atravieso un periodo negro que algún día acabará".

Su pole position y su victoria en el Gran Premio de Australia que abría el campeonato parecían el anuncio de un duelo interno sin precedentes en el seno del equipo Renault. Sin embargo, en las siguientes tres carreras, Fisichella sufrió dos accidentes y un problema de motor y en ninguna de las demás consiguió subir al podio. Era evidente que su coche no ofrecía las mismas prestaciones que el de Alonso, o por problemas mecánicos o porque no acertaba en la puesta a punto. El colmo de las desgracias fue que en las dos últimas carreras, en Francia y en Gran Bretaña, caló el coche por sus prisas en salir del box en su última parada. Fue un error que en Silverstone adquirió mucha trascendencia porque le costó el tercer puesto, que acabó ocupando ¡Raikkonen!

"Lo sentí y no sólo por mí y por el equipo, sino también por Fernando, que hubiera ampliado un poco más la diferencia", comentó el piloto italiano. Fisichella siente una gran simpatía por el asturiano, cosa extraña entre los dos pilotos de la misma escudería. Habitualmente, el compañero es el peor rival. "Entre nosotros hay rivalidad", afirma Fisichella. "Pero Fernando es un tipo simpático con el que vale la pena salir a cenar o pasar un rato. Tiene un carácter muy similar al mío. Somos amigos y nos divertimos juntos. Pero cuando hay que trabajar cada cual va a lo suyo y nos concentramos en nuestras tareas".

"Alonso es el mejor compañero que he tenido", dice. Y no es un halago banal. Todo lo contrario. "Somos rivales, pero entre nosotros somos muy honestos. Esa es la base de nuestra relación", afirma. "Alonso es un piloto muy, muy veloz, muy constante y que hace pocos errores. Desde el principio del campeonato ha sido valiente y la suerte le ha acompañado". Cuando se le habla de las cinco victorias que lleva el español, sonríe y responde: "Me alegro por él y por el equipo. Es importante seguir ganando para mantener el liderato por marcas. Creo que Alonso merece lo que tiene y espero que se convierta en campeón mundial. Y yo pienso que estoy remontando y que puedo ascender muchas posiciones en la clasificación en los próximos grandes premios".