El presidente se reúne con el poeta disidente cubano Raúl Rivero
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, recibió en la mañana de ayer en el Palacio de La Moncloa al poeta y periodista disidente cubano Raúl Rivero. Éste llegó el viernes a Madrid con su esposa, Blanca Reyes, su madre y su hija de 11 años, una vez que gracias a las gestiones de diversas instancias, entre ellas el Gobierno español, obtuvo un permiso de salida de Cuba durante dos años.
Rivero, que residirá en Madrid, donde prevé trabajar como periodista y escritor, departió durante dos horas con Rodríguez Zapatero de literatura en general y poesía en particular, y de política. El disidente cubano, que permaneció 20 meses encarcelado tras ser condenado a 20 años por colaboración con Estados Unidos, estuvo acompañado de su esposa en su encuentro con el presidente, quien le dio la bienvenida a España y se interesó por los proyectos que pretende desarrollar.
Rivero, uno de los más importantes poetas cubanos de su generación, se convirtió en símbolo de la disidencia tras el proceso al llamado Grupo de los 75, durante la primavera negra de 2003 que determinó protestas internacionales contra el régimen de Fidel Castro.
Fuentes socialistas explicaron que el propio Rivero, excarcelado en noviembre pasado, se puso hace tres semanas en contacto con la responsable de Relaciones Internacionales del PSOE, Trinidad Jiménez, para expresarle su deseo de viajar a España y quedarse durante un tiempo.
La responsable socialista, con el apoyo del partido y en coordinación con el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación, inició gestiones con las autoridades cubanas para lograr que el régimen de Fidel Castro permitiera la salida de Rivero de la isla.
"Máxima discreción"
Estas gestiones, que han concluido con el beneplácito de La Habana, se llevaron a cabo con la "máxima discreción", según las mismas fuentes, para evitar que el asunto se "politizara". El Gobierno cubano, además, no ha puesto fecha límite para la estancia de Rivero en España, según las mismas fuentes.
En el momento de su arresto, en marzo de 2003, Raúl Rivero dirigía la agencia independiente Cuba Press, que fundó en 1995. Además, era asesor de la revista disidente De Cuba, vicepresidente regional de la Comisión de Libertad de Prensa de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y colaborador de varias publicaciones extranjeras.
Las organizaciones de disidentes cubanos en España, la Asociación Cubana Española, Cuba Democracia Ya y la Asociación Española Cuba en Transición, manifestaron su alegría por la salida de Rivero de Cuba, si bien alertaron de que su liberación y llegada a Madrid es una "maniobra" y un "cambio de moneda" por parte de Fidel Castro para que la Unión Europea levante definitivamente sus sanciones.
