El 'Quadern' y el asunto del catalán
Emilio Manzano, en su columna Shaw, en el Quadern del 18 de noviembre, describía detalles de la traca sinfín sobre el catalán y aledaños que ha prendido otra vez en Barcelona, Valencia y Palma. El PP ha alzado murallas y ha recuperado la artillería ancestral, mientras los nacionalistas acarrean pólvora al siniestro en el que se reduce su nación cultural. En el caso balear, han surgido torpes polémicas sobre el idioma, avivadas porque el Gobierno ocupará las frecuencias de TV-3 y 33 con las de su televisión IB3. Aquí Manzano cometió un fallo en su diagnóstico al decir que "no conoce otro instrumento de conexión cultural eficaz entre Cataluña y Baleares" que los dos canales catalanes. Craso error, señor Manzano, usted oteó a lo lejos al paisaje del éter audiovisual y no miró a sus pies, la letra y el papel: era usuario de la portada de la revista semanal cultural bilateral escrita en catalán de más circulación: el Quadern se refiere a temas, libros, literatos, artistas, músicos o televisiones del ámbito insular y continental. Hace 1.092 semanas que existe este suplemento. Lo celebro y cada jueves debo reservar EL PAÍS en mi quiosco.
