_
_
_
_
_
Reportaje:

Españolas devaluadas en Argentina

Sólo Repsol-YPF ha esquivado la crisis

Alejandro Rebossio

El ministro de Economía de Argentina, Roberto Lavagna, calificó hace dos semanas a la devaluación de su país del año pasado como la de mayor éxito del mundo. Se refería a la ganancia de competitividad que supuso, pero la frase levantó una ola de críticas de economistas y políticos, que le recordaron el aumento de la pobreza que generó la depreciación de la moneda.

Las empresas españolas, con algunas excepciones como Repsol YPF, también se cuentan entre los perjudicados por la devaluación y buena prueba es su pérdida de peso en la economía argentina y el retroceso que han sufrido en la clasificación de las más importantes.

La revista Mercado elabora todos los años la lista de las 1.000 empresas que más venden en Argentina y hace poco publicó la de 2002, en la que ha quedado plasmada el efecto de la devaluación en los distintos sectores. YPF, la filial argentina de Repsol YPF, sigue como líder, pero han caído otras sociedades de capital español: el grupo Telefónica bajó del cuarto puesto al noveno, Edesur (distribuidora de Endesa en Buenos Aires) se desbarrancó del 40 al 69, Aguas Argentinas (25% de Aguas de Barcelona) retrocedió del 65 al 90, Metrogas (31% de Repsol YPF) cayó del 55 al 93 y Gas Natural Ban, del 89 al 128.

La devaluación del peso y la congelación de tarifas ha relegado la importancia de las filiales españolas en la economía del país austral

La salida del tipo de cambio fijo condujo a una devaluación en términos reales (descontado el impacto de la inflación) del 60% en el peor momento de 2002.

En la actualidad, a 23 meses del fin de llamada convertibilidad argentina, que ató al peso con el dólar durante 11 años, la pérdida real del valor de la moneda local asciende al 48%. Cualquier devaluación modifica la estructura relativa de los precios, favorece a los sectores de bienes transables (que se pueden exportar), como el petrolero, y perjudica a los de bienes no transables (los que sólo se destinan al consumo interno), entre ellos los servicios públicos en los que se concentró la inversión española de los noventa. Así como la atadura al dólar favoreció a estos últimos, la actual situación beneficia a los primeros. "Se ve que serán los ganadores de esta década", dice el consultor Miguel Kiguel.

Al cambio de los precios relativos se ha sumado la congelación de tarifas que Argentina ha impuesto a los servicios públicos en enero de 2002, al mismo tiempo que se devaluaba. "El ranking muestra a las claras el resultado de la devaluación: hubo una gran cantidad de empresas que se beneficiaron en forma notoria y muestra qué injusto e insensato es que se sostengan congeladas las tarifas", se quejó una fuente de Endesa en Buenos Aires, después de que el martes comenzara la negociación formal del Gobierno de Kirchner con las eléctricas para definir los precios y los contratos.

Protestas de Endesa

"Si Edesur cayó 29 puestos es porque hubo 29 empresas que se llenaron los bolsillos con la devaluación y todavía nos siguen pagando tarifas congeladas", añadió el directivo de la empresa española. Muchas de esas compañías beneficiadas por la salida de la convertibilidad habían sido las más perjudicadas por ese régimen, que apreció el peso en sus últimos años.

Otra víctima de la congelación de tarifas ha sido Autopistas del Sol, participada en el 61,7% por ACS. Dragados, que descendió de la posición 269 a la 343. Concesionario del Oeste, la empresa de Acesa que controla otra carretera con peaje, bajó del sitio 404 al 484. Las empresas de servicios públicos también se cuentan entre las que más perdieron en 2002. Telefónica de Argentina, la división de telefonía fija del grupo, fue la segunda en la clasificación por resultado negativo: perdió 996 millones de dólares; Aguas Argentinas quedó número 17, con 241 millones; Autopistas del Sol, en el puesto 24, con 164 millones; Metrogás, en el 31, con 141 millones.

Del lado de los ganadores figura Repsol YPF. Su filial petrolera YPF fue la empresa argentina que más ganó en 2002: 969 millones de dólares. La petroquímica PBB Polisur, cuyo 72% pertenece a Dow Chemical y el 28% a la petrolera española, escaló de la posición 77 en la clasificación por ventas a la 46. Refinor (50% de Repsol YPF), que refina y comercializa combustibles en el norte de Argentina, subió del 128 al 80. Mega (35% de Repsol YPF), que fracciona el gas para la industria petroquímica, trepó del 144 al 86.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_