Detenido en París un abogado acusado de dar informes a un etarra

El abogado Unai Errea, defensor habitual de presuntos miembros de ETA detenidos en Francia, fue arrestado la noche del lunes en París bajo sospecha de haber transmitido "documentos militantes" a un presunto etarra encarcelado en la prisión de La Santé, según fuentes judiciales. El letrado Errea se encontraba ayer bajo custodia en los locales de la División Nacional Antiterrorista (DNAT).

La detención del abogado se produjo después de que asistiera a la presunta etarra Gaxuxa Arrambide. Errea fue arrestado en el Palacio de Justicia, en presencia de reprentantes de la Fiscalía y del Colegio de Abogados de París. La Fiscalía investiga ahora si el abogado entregó "documentos militantes" a un presunto etarra al que visitó el 13 de mayo en la prisión de La Santé.

Por otro lado, el Tribunal Supremo holandés autorizó ayer la extradición de Juan Ramón Rodríguez Fernández, Marc, presunto miembro del comando Gorbea de ETA. Marc fue detenido en enero de 2002 en la capital holandesa y había formado parte, como cantante, del grupo musical catalán Kop.

El juez Brord Davids, vicepresidente del Supremo, añadió a la sentencia un consejo singular dirigido al Ministerio holandés de Justicia, encargado de tramitar la extradición. Rogó a sus responsables que pusieran como condición para la entrega de Rodríguez que éste no fuera incomunicado una vez ingresara en la prisión española que se designe. Davids consideró en el fallo la pertinencia de la extradición de Marc como presunto miembro de una organización terrorista, pero rechazó que el detenido hubiera servido de enlace de ETA en el extranjero.

Por otro lado, ayer fueron suspendidas las comparecencias de los tres directivos de la Radio y Televisión Vasca (EITB) que estaban previstas para hoy ante la Fiscalía de la Audiencia Nacional para explicar las circunstancias de la emisión de un vídeo de ETA. La razón de la suspensión es que los mismos hechos han sido denunciados por una particular ante la Audiencia Nacional, y al haberse abierto un proceso penal, la Fiscalía no puede seguir investigando por su cuenta.