Sanguinetti aboga por poner "algo de orden en el caos de las apariencias" del arte actual

El ex presidente de Uruguay y director del V Simposio Internacional Diálogos Iberoamericanos, Julio María Sanguinetti, concluyó ayer el encuentro con una reclamación: "Introducir algo de orden en el caos de las apariencias". Y abogó por un "orden abierto, no dogmático", que proponga en un mundo globalizado "ciertos parámetros para seguir recorriendo un camino". Un camino que pasa por la "institucionalizar" la cultura, sobre todo en el ámbito latinoamericano debido a sus carencias. El coordinador Kevin Power, por su parte, cuestionó el papel de las instituciones.

Si bien no son antitéticas, sí se evidenciaron ayer dos interpretaciones diferentes de una realidad, por otro lado, muy poco homogénea, en la sesión de conclusiones del simposio que llevaba el ambicioso título de El fututo del arte contemporáneo en el horizonte del S XXI, organizado por el Consorci de Museus de la Comunitat Valenciana en el Museo de Bellas Artes de Valencia, que dirige Consuelo Ciscar.

Mientras Kevin Power, que está a la espera de la publicación en el BOE de su nombramiento como subdirector del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, incidía en que una de las cuestiones nucleares del debate es "el cuestionamiento de la estructura del arte, en cuanto a su funcionamiento tanto de la propia obra como de las instituciones"; Sanguinetti apelaba a la "necesidad de institucionalizar la cultura y el arte para balizar un camino por el que pueda ir transitando la libertad creativa" a través de la creación de redes de museos o archivos. El ex presidente de Uruguay, que ya participó en otras ediciones del simposio, matizó su discurso circunscribiéndolo fundamentalmente "al ámbito latinoamericano" a causa de "la debilidad de sus instituciones culturales".

Sanguinetti también mostró su preocupación personal "por la obra de arte en sí" y manifestó que le sigue "angustiando lo efímero" de las creaciones, ya que "el registro será todo lo valioso que se quiera pero no es la obra en sí".

Power habló de la necesidad de "mantener el filo crítico y de cuestionar el papel de los museos". En este punto, a lo largo del simposio, que ha coordinado junto a Fernando Castro, el crítico de arte ha subrayado el fenómeno de la proliferación en España de centros de arte contemporáneos que no tienen un contenido definido ni un proyecto claro. De otro lado, Power ha señalado también la tendencia extendida de realizar "acciones creativas en grupo" de carácter social y crítico, que "buscan sobre todo contenido humano", a través de un arte efímero, que desmitifica el objeto de arte. No obstante, el sistema artístico no puede sobrevivir sin el objeto mercantil, necesita ese objeto artístico, añadió el próximo subdirector del Reina Sofía.

Durante las jornadas, que se iniciaron el sábado, no se ha tratado en el plano formal el problema que acarrea la posibilidad de una guerra, si bien si que ha estado en boca de los cerca de 90 especialistas, entre directores de museos, artistas y críticos, que han participado en el simposio, según comentó Power.

Sanguinetti quiso destacar también en su discurso final, en el que citó tanto a Karl Marx como a Adam Smith, que la presencia de Valencia en Latinoamérica es mayor que la de Madrid o Barcelona, elogiando la política desarrollada por Ciscar y el Consorci.