KPN anuncia el despido de 4.800 personas para reducir los gastos
Belgacom suprimirá más de 3.000 empleos
La drástica medida, tomada por el recién estrenado presidente Ad Scheepbouwer, no ha causado sorpresa. La operadora, en la que el Gobierno holandés aún tiene un 35% del capital, atraviesa por graves problemas económicos y ya el pasado año, cuando anunció los primeros números rojos de su historia, advirtió de la necesidad de un plan de reestructuración que podría costar unos 8.000 empleos.
Recientemente se anunciaron pérdidas netas del primer semestre de 172.708 millones de pesetas (1.038 millones de euros), lo que supone multiplicar por 50 las pérdidas sufridas en igual periodo del año anterior. Además, las enormes deudas que arrastra el emblemático operador a consecuencia de una poco acertada política de expansión internacional se han convertido en un lastre insuperable.
La incursión en la telefonía de tercera generación (UTMS) y la compra de la operadora de telefonía móvil alemana E-plus arrojaron a la empresa a un tremendo agujero financiero que, tras la venta apresurada de algunas actividades, todavía asciende a 22.800 millones de euros.
La crisis también ha llegado a Bélgica, donde la operadora de telefonía fija Belgacom ha presentado a los sindicatos su proyecto de suprimir entre 3.000 y 4.000 empleos como parte de un plan de reconversión que afectará a 7.000 empleados, según informó la compañía. El plan se comenzará a negociar de forma inminente con los sindicatos.
