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Bueno Álvarez retrata una familia marcada por la tiranía del padre

El novelista presenta 'El último viaje de Eliseo Guzmán' en Sevilla

El viaje de regreso de un anciano inválido con sus dos hijos a su pueblo natal, en la serranía de Jaén, va descubriendo unas relaciones familiares marcadas por la tiránica personalidad del padre. Con esta historia, Juan Antonio Bueno Álvarez (Barcelona, 1961) ganó el XVI Premio Andalucía de Novela, dotado con siete millones de pesetas. Alfaguara edita El último viaje de Eliseo Guzmán, una novela rural que refleja 'los 60 últimos años de esta familia, que son los 60 últimos años de la historia de Andalucía'.

La novela es la tercera de Bueno Álvarez, que siempre ha residido en Madrid, donde trabaja como profesor de Literatura. Los olivares de la sierra de Jaén son el paisaje en el que se sitúa la acción, que transcurre prácticamente en un fin de semana. Eliseo Guzmán es un hombre despótico, 'un auténtico tirano', un terrateniente arruinado que abandonó su aldea natal cuando su hija María, la mayor de los tres hermanos, quedó embarazada.

Representa, explicó ayer el autor, a los 'vencedores vengativos' de la guerra civil, orgullosos de su victoria. Antes de morir, convence a sus dos hijos varones, Tomás y Alfredo, para que le lleven a su pueblo, que para el anciano supone 'un viaje a su juventud y su felicidad'. Durante ese fin de semana se van revelando las relaciones conflictivas entre los miembros de la familia.

El padre, con un fuerte sentiemiento de clase, es un personaje antipático -'repugnante', fue el calificativo que empleó Antonio Orejudo, ganador de la edición anterior del premio y miembro del jurado en esta convocatoria, fallada el pasado mes de junio-; un hombre que utiliza el sexo como 'instrumento de dominación y humillación de los que considera más débiles'. Tomás, el mayor de los varones, siempre ha estado enfrentado a su padre. En su juventud, fue un universitario antifranquista y ahora se encuentra 'desnortado' por la crisis de la izquierda. Alfredo, dos años menor, ha heredado la ideología del patriarca, aunque adaptada a su tiempo. Su único valor es el dinero.

Las mujeres de El último viaje de Eliseo Guzmán son doblemente perdedoras. Salvadora se casó sin amor con Eliseo. Su vida ha sido un infierno y ha perdido la razón. Es la 'voz cáotica' de la narración. La hija, María, fue la causa del traslado de la familia a Madrid, por su temprano embarazo. 'Es la causa de la deshonra familiar. Vive con esa culpa casi encerrada en vida e intenta hacer pasar a su hija, Alicia, por su hermana', comentó Bueno Álvarez.

El escritor, autor también de La verdad inútil y Las estrategias del bachiller, asegura que no ha novelado 'una historia de buenos y malos', y aunque la obra es producto de su imaginación 'en un 95%' permite conocer, a través de la familia Guzmán, el trasfondo histórico de la España franquista. 'Los 60 años de historia de los Guzmán son los 60 últimos años de la historia de Andalucía y también de España'.Para Bueno Álvarez, que reconoce que su vinculación con el mundo rural es circunstancial, el personaje de Eliseo Guzmán podría representar un modelo de conducta reaccionaria y caduca de cualquier región española.

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El Premio Andalucía de Novela está organizado por la Fundación BBVA. El jurado estuvo compuesto por el escritor chileno Jorge Edwards, la escritora Nativel Preciados, el académico Domingo Ynduráin, el crítico Santos Sanz Villanueva y el escritor Antonio Orejudo.

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