3M eliminará 5.000 puestos de trabajo ante la caída del consumo
El fabricante de Scotch-Brite suprimirá 60 empleos de los 900 de España
La mitad de los despidos serán aplicados fuera de Estados Unidos. 3M incluirá una partida de 600 millones de dólares (111.000 millones de pesetas) para hacer frente al ajuste de empleo, con el que espera ahorrarse 300 millones de dólares (55.500 millones de pesetas) anuales una vez que la empresa dé por finalizado, a finales de año, su plan de reestructuración.
El ajuste en la llamada compañía de las tres emes (Minnesota, Mining & Manufacturing) no cogió por sorpresa. Tras unos resultados peores de lo esperado en el último trimestre de 2000, sus responsables ya anunciaron medidas para adaptar la producción a la caída del consumo en Estados Unidos por la desaceleración económica. 'Es difícil de creer que las condiciones económicas vayan a mejorar mucho en el próximo año', indicó el presidente de 3M, James McNervey, en un comunicado.
El recorte se anunció tras presentar unos resultados en línea con las expectativas de los analistas. 3M ganó entre enero y marzo pasados 467 millones de dólares (86.400 millones de pesetas), un 2,4% más que hace un año. Las ventas crecieron un 2,3%, hasta los 4.170 millones de dólares (771.450 millones de pesetas). Sus acciones, que han ganado un 26% en el último año, subieron ayer un 3,11% en la Bolsa de Nueva York.
Productividad
'En este entorno económico incierto, estamos centrándonos en las cosas que podemos controlar', indicó McNerney durante una conferencia con inversores. McNerney, de 51 años, se convirtió en enero pasado en el primer presidente traído de fuera de 3M para conducir la compañía fundada hace 98 años. Y lo primero que hizo fue aplicar el famoso programa de productividad (Sigma Seis) patentado por su anterior empresa, el gigante estadounidense General Electric, conocida por ser una de las corporaciones más rentables del mundo.
McNerney se enfrenta al reto de conducir una firma cuyo beneficio está muy sometido a los éxitos en innovación. La mitad de los 15.000 millones de dólares (2,7 billones de pesetas) que ingresa por ventas cada año proviene de la tecnología. Pero la compañía con sede en St. Paul (Minnesota) también tiene negocios en la industria, la salud y los productos de consumo, oficina y seguridad. Opera en 60 países y da servicio a clientes de más de 200. En total, unos 50.000 productos.
En España suprimirá 60 empleos, según indicó su portavoz, Francisco Aguadero. El recorte se llevará por jubilaciones anticipadas. Además, la multinacional cerrará sus oficinas de Valencia y Bilbao, pero mantendrá su actividad en el complejo de Rivas-Vaciamadrid (Madrid), donde fabrica productos de consumo y automoción, y la fábrica que una de las filiales de la empresa (Apsa) tiene en Pamplona.
