Tres duros golpes contra un grupo terrorista emblemático

La dirección de la organización terrorista ETA debió de verse sacudida, desde la distancia, al descubrir que uno de sus buques insignia del terror volaba por los aires el pasado el pasado 7 de agosto. El jefe del comando Vizcaya, Patxi Rementeria, el otro liberado (a sueldo) del grupo, Ekain Ruiz, y los dos colaboradores que se encontraban en el turismo, Urko Gerrikagoitia y Zigor Aranbarri, eran destrozados por su propia bomba en el barrio bilbaíno de Bolueta cuando se dirigían hacia el objetivo elegido para cometer un atentado. Los 25 kilos que transportaban en el turismo reventaron a los integrantes del comando y, de paso, las esperanzas puestas por la dirección etarra en uno de sus grupos emblemáticos.La deflagración, sin embargo, no hizo desaparecer todas las pistas y, poco después, la Ertzaintza (policía vasca), tras analizar la agenda de Patxi Rementeria, inició una operación contra el Vizcaya en la que se detuvo a seis personas y se neutralizó un piso franco que los terroristas tenían en el municipio vizcaíno de Galdakao. Posteriormente, algunos de los detenidos fueron puestos en libertad por los jueces de la Audiencia Nacional.

Operación de enero

A Patxi Rementeria se le acabó la suerte en verano. Pero el jefe del comando Vizcaya había logrado salir airoso de la operación antiterrorista desarrollada por efectivos del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) en los primeros días de enero, cuando este grupo intentó cometer un atentado contra un patrulla de la Guardia Civil. ETA había logrado reconstituirlo durante la tregua y quería ponerlo a funcionar cuanto antes.Tras el atentado frustrado del 3 de enero, la Policía detuvo al liberado Guillermo Merino, huido desde 1998 tras la desarticulación del comando Mara, un satélite del Vizcaya, y encuadrado en la nueva estructura de comandos diseñada en plena tregua. Junto a él, la policía arrestó a Jon Urretavizcaya Sauquillo. El tercer detenido fue Julen Uriarte Iturriaga, de 28 años, un antiguo miembro de Jarrai (las juventudes de KAS) y candidato de HB en las elecciones de 1994. Posteriormente, se arrestó a Francisco Javier Cano Arce e Izaro López, todos ellos encarcelados por el juez por colaboración con banda armada. Rementeria había burlado la operación policial a bordo de un coche bomba cargado con 20 kilos de dinamita.

Rementeria condujo el turismo hasta la población vizcaína de Otxandio, donde abandonó la dinamita, un subfusil, un escáner de frecuencias y varios detonadores. La siguiente vez que reapareció, fue para volar por los aires, en Bolueta.