Evidencias de chapuza
El secretismo que la Cámara de Comercio de Bilbao ha mantenido en relación al affaire Cámara-Gorordo ha mantenido en este asunto, está dando lugar a errores de bulto.Se está hablando de despido con indemnización. Las Cámaras, por ley de 23 de marzo de 1993, son corporaciones de derecho público y, por tanto, Gorordo es funcionario. Y a un funcionario no se le puede indemnizar en ningún caso. A un funcionario se le abre un expediente que finalizará en la separación del servicio, en una sanción de suspensión temporal o en su readmisión. Pero en ningún caso tiene indemnización. Y algo se colige cuando el presidente de la Cámara habla de recurso contencioso-administrativo. En ningún caso el despido laboral va por la vía contencioso-administrativa; el del funcionario, sí. Hay evidencias de auténtica chapuza, de malversación de fondos públicos, y lo correcto en un Estado de Derecho es que intervenga el Tribunal de Cuentas o incluso el fiscal, de oficio.-