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Pujol amenaza con convocar nuevas elecciones si no es elegido presidente

Jordi Pujol amenazó ayer con convocar nuevas elecciones autonómicas si no consigue los apoyos suficientes para ser investido presidente y sacar adelante los aspectos fundamentales del programa electoral de Convergència i Unió (CiU), que se concretan en el incremento del techo competencial y en un nuevo pacto fiscal. En su primera comparecencia ante la prensa tras los comicios del domingo, Pujol se mostró partidario de una mayoría nacionalista en el Parlament, pero fue lo suficientemente ambiguo como para presentar un escenario que complaciera tanto a Esquerra Republicana como al Partido Popular.

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CiU es la fuerza política que ha obtenido mayor representación parlamentaria en Cataluña. Por tanto ha de ser ella la encargada de formar el próximo Gobierno catalán. Si no es así, se repetirán las elecciones autonómicas. "Y no creo que lo desee nadie", subrayó Pujol. Éste es el aviso que el presidente de la Generalitat en funciones quiso transmitir ayer a los partidos que se sienten con suficiente legitimidad, es decir, los socialistas, para constituir el futuro Ejecutivo.Los nacionalistas se inclinan por gobernar en solitario y pactar los apoyos a partir de los cuatro puntos básicos de su programa electoral: incremento del autogobierno, mejora de la financiación, medidas para asegurar el crecimiento económico y consolidación del Estado de bienestar. Estos puntos son innegociables pues constituyen, a su entender, los ejes del programa y la idea que CiU tiene de Cataluña.

La mayoría de la ejecutiva de Convergència Democràtica se pronunció ayer a favor de alcanzar una mayoría nacionalista en el Parlament. Pujol, aunque ayer se ratificó en esta idea, se mostró lo suficientemente ambiguo como para no descartar ningún pacto y obvió cualquier referencia a que el Partido Popular ya anunciado que le apoyará en la investidura.

Pujol prefiere a los nacionalistas de Esquerra, según explicó en la rueda de prensa, pero éstos plantean la reforma del Estatuto catalán. CiU, por el contrario, quiere incrementar el techo competencial a partir del actual marco estatutario y constitucional, lo que le acerca a los conservadores del PP. Una vela a Dios y la otra al diablo.

Los independentistas optan por un sistema de financiación similar al cupo vasco, mientras que Pujol ayer se limitó a hablar de "mejora". El PP, a través del presidente de la Comunidad Valenciana, Eduardo Zaplana, ya ha presentado una propuesta marco para todas las comunidades autónomas que en algunas aspectos, por ejemplo en la cesión de los impuestos especiales, coincide plenamente con CiU. "¿Excluye un pacto con el PP?", le preguntaron ayer al presidente. "Excluyo un pacto con el PP y con ERC", contestó, en alusión a la voluntad de los independentistas de reformar el Estatuto. El presidente señaló que la próxima semana CiU iniciará las negociaciones con otros partidos e intentó quitar hierro a las críticas que ha dirigido contra ERC durante la campaña. Unos acuerdos, puntualizó, que permitan en la próxima legislatura progresos muy sustanciales en la financiación y el autogobierno de Cataluña.

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Pujol anunció que reestructurará a fondo la composición del Gobierno porque no existe, a su juicio, una situación de interinidad, en referencia a la celebración de las elecciones legislativas españolas en primavera.

Por otra parte, el presidente en funciones se reafirmó en que el actual consejero de Presidencia, Xavier Trias, encabezará la candidatura de CiU en las generales. Asimismo dejó entrever que las del pasado domingo eran las últimas elecciones a las que concurría como candidato a la presidencia.

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