REINA DESTRONADA

Noemí Villafanes, una joven de 18 años, ha descubierto en plena adolescencia que la vida pasa factura no sólo por los actos propios, sino también por los antecedentes familiares, sobre todo en el medio rural. Noemí fue nombrada hace unos días primera dama de las fiestas de Mirandilla (Badajoz). Tan contenta ella. Después vino el sofoco y la tristeza. El alcalde de esta población de 1.400 habitantes, José Gil Donoso, del Partido Popular, decidió unilateralmente anular la designación de la chica sin contar con la comisión de 22 personas que la había nombrado. ¿Por qué? Aurelia Fernández, madre de Noemí, da su versión: "Una venganza peronal". Aurelia es sobrina de José Gil y hace unos veinte años vivió y trabajó en casa del actual regidor de Mirandilla. Asegura que su tío "intentó abusar" de ella. Abandonó la casa y desde entonces ambas familias no se han cruzado ni media palabra. Aurelia puso una condición para que su hija participase como primera dama: "Que él (el alcalde) no la coronase ni bailara con ella. No me importaba que lo hiciera otro concejal, pero él no". Después pasó lo que pasó, que Gil tiró de sus atribuciones y ordenó que otra joven ocupase el lugar de Noemí. Este periódico intentó conocer la versión del alcalde: "Venga a Mirandilla; por teléfono, no". Nuevo requerimiento e igual respuesta: "Por teléfono, no; no tengo tiempo". El día 21 serán coronadas la reina y damas de las fiestas. Aurelia no sabe qué hará su hija, ni pondrá obstáculos "para que vaya de espectadora", pero dice con voz quebrada que "esto es absurdo. Hay demasiado rencor". -