Investigar y crecer
Centralair se vanagloria de que su capacidad de inversión en tecnología le diferencia de sus competidores multinacionales. De hecho, en la empresa aseguran que son los únicos en su sector con un departamento propio dedicado a la investigación y desarrollo (I+D). Centralair invierte un 10% de lo que gana en investigación y tiene el 11% de su plantilla dedicada a estos menesteres. "Gastamos mucho dinero en desarrollo porque es la única manera de ser independientes", indica Jesús M. Lazcano, director gerente de Centralair. De hecho, hace un año la compañía solicitó la patente en la Unión Europea, Estados Unidos y Japón para una innovadora solución electrónica que permite que las válvulas se abran y se cierren de una forma automática. Los sectores beneficiados de este producto serán la industria petroquímica, la del agua (presas, potabilizadoras, tratamiento de aguas residuales, saneamiento, conducción de aguas) y el sector energético (cogeneración). Este producto se ha presentado con éxito en una feria internacional en Holanda el pasado octubre. Sin embargo, se enfrenta al problema de ser unos desconocidos en los mercados internacionales. "Esto nos muestra que la industria española tiene que perder el complejo de aldeanos que tenemos", señala Jesús M. Lazcano. Junto al gasto en tecnología, una de las preocupaciones de Centralair es la formación. "Se trata del reto del siglo XXI", indica Lazcano con un gesto de asignatura pendiente en la que falta tiempo para entrar .
