Checa y Crivillé amenazan en Jerez
Dos pilotos españoles, Carlos Checa y Àlex Crivillé, anunciaron ayer cosas buenas para mañana en Jerez. La pareja catalana, paisanos pero rivales, batieron a toda la oposición internacional en los primeros ensayos para el Gran Premio de España de 500cc. Fue sólo un apunte, un primer resultado quizá intrascendente, pero sin duda un dato significativo de las aspiraciones de ambos en la tercera carrera de la temporada. Checa y Crivillé, Crivillé y Checa, protagonistas del Mundial desde hace tiempo, buscan la gloria este fin de semana en casa.Puede que Mick y Max, Doohan y Biaggi, sean las grandes estrellas del momento en el Mundial de motociclismo. Ellos son tetracampeones y ellos ganaron las dos primeras pruebas del curso. Nadie lo discute, pero tampoco se cuestiona que justo detrás de ellos se encuentran los dos españoles, preparados para el asalto. Y un trazado tan apropiado como el de Jerez, conocido, motivador y especial, resulta perfecto para pensar en la victoria. Crivillé ya la logró el año pasado, mientras que Checa también sabe lo que es ganar en casa, aunque fuera en su otro hogar, el de Montmeló, donde conquistó en 1996 su único triunfo en la cilindrada del medio litro.
Ayer, en los entrenamientos, el noi de Seva y el noi de Sant Fruitós dejaron claras sus intenciones y se pelearon entre ellos por conseguir la pole position provisional. Checa fue finalmente quien logró el mejor tiempo, aunque con un registro todavía alejado de los récords de la pista andaluza. Aventajó en dos décimas a Crivillé, y ambos dejaron atrás a Biaggi, que fue tercero, y sobre todo a Doohan, que sólo pudo clasificarse undécimo. El piloto australiano se quejó de problemas de puesta a punto en las suspensiones de su Honda.
«Estoy satisfecho, pero esto no significa nada», explicó Checa. «Hay que pensar en la carrera del domingo. Entonces es cuando hay que acabar primero. Incluso hay que pensar más allá, en el título mundial, que es mi objetivo este año». De momento, Carlos ocupa la segunda posición en el campeonato, gracias a su brillante segunda plaza en la carrera anterior, en Malaisia. Ese dato ya había animado a miles de fieles a desplazarse al circuito de Jerez, y los resultados de ayer servirán seguramente para acabar de abarrotar el recinto andaluz.
Crivillé, por su parte, se manifestó en términos parecidos: «La moto va mejor que en los dos primeros grandes premios, pero hay que esperar. Lo importante es lo que suceda en la carrera del domingo». No obstante, el piloto de Repsol-Honda, tercero por ahora en el Mundial tras sus cuartos lugares en Suzuka y Johor, se mostró muy motivado y rindió por encima de lo que es habitual en él en los entrenamientos. Hoy, en la segunda jornada de ensayos, deberá confirmar, como Checa, lo apuntado ayer, aunque la previsión meteorológica es adversa. Los otros españoles de la categoría reina obtuvieron la siguiente clasificación: Juan Bautista Borja (Honda), 16º, y Sete Gibernau (Honda), 17º.
En 250cc, José Luis Cardoso (Yamaha) se convirtió en la sorpresa del día al clasificarse quinto, sólo superado por la armada Aprilia, clara dominadora de la jornada en un circuito en el que la marca italiana se entrenó a conciencia durante la pretemporada. El piloto sevillano podría incluso haberse mezclado con ellos y amenazar el mejor tiempo logrado por el italiano Loris Capirossi, pero otro piloto le molestó en su vuelta más rápida, en una maniobra que le costó varias décimas. El compañero de Cardoso, Luis D'Antin, se clasificó noveno.
Menos brillante resultó la presentación de los españoles en la cilindarda menor, los 125cc. De los que disputan habitualmente el Mundial, José Ramón Ramírez (Aprilia) ocupó la decimocuarta posición de la parrilla provisional, Gelete Nieto (Aprilia) logró el 17º mejor tiempo, Emilio Alzamora (Aprilia) fue 20º y Juan Enrique Maturana (Yamaha), 21º. Los pilotos invitados sólo para esta carrera se clasificaron más atrás y no brillaron. El más rápido de la categoría fue el italiano Roberto Locatelli (Honda).
