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El Barca vacía la enfermería, pero Iván se vuelve a romper

Àngels Piñol

Louis Van Gaal, técnico del Barça, lanzó ayer un suspiro de alivio al repasar el parte médico. La enfermería azulgrana, repleta el pasado lunes de zagueros, dio ayer buenas noticias. Los porteros Hesp (esguince de tobillo), Busquets (un dedo torcido), Sergi (contusión en el peroné), Nadal (molestias en la rodilla) y Bogarde (problemas musculares) evolucionan positivamente de sus lesiones y todo indica, salvo imprevistos, que podrán actuar ante el Madrid. La recuperación de esos defensas se presentaba vital ante la baja de Couto (sancionado) y Abelardo (baja tras ser intervenido).

"No tengo ninguna duda de que podré jugar. Estoy mejor que antes", aseguró Hesp, que recayó el lunes ante el Racing del esguince que sufría. Fue el doctor Baños quien aseguró que los otros cuatro futbolistas tocados -Sergi fue el único que ayer descansó- están en condiciones de saltar al césped.Pero no acaban aquí los quebraderos de cabeza de Baños: al angustioso caso de Guardiola, que se recupera de su séptima lesión muscular en un centro que se mantiene en secreto, se unieron ayer los nuevos problemas de Iván de la Peña. Lo Pelat, que ya era baja ante el Madrid, padece ahora dolor en la tibia derecha.

La plantilla azulgrana reanudó ayer los entrenamientos tras descansar el miércoles. Su vida ha sido esta semana muy distinta a la del Madrid, que se entrenó ayer en El Muntanyá ante un millar de seguidores. Además del día de descanso, Van Gaal ha mantenido su política de permitir que los jugadores duerman la víspera en casa y citarlos sólo la mañana del día del partido. "Es mejor no concentrarse. Puedes descansar en casa con los tuyos. Aquí nadie hace cosas raras. Somos profesionales", dijo Luis Enrique.

Elogios al rival

El asturiano no quiso hablar de su ex equipo -"así no habrá malas interpretaciones"-, pero abundó en una idea extendida en el vestuario: el resultado de mañana no decidirá la Liga. Con los números en la mano, el Barça se siente seguro: si gana se colocará a seis puntos de su rival -cinco más el del goal average- y con un partido menos. Pero tanto traspiés esta temporada llama a la prudencia. El grupo intuye que el Madrid se ha rearmado moralmente en la Liga de Campeones. "Espero que se mantenga la tradición [el Madrid no gana en la Liga en el Camp Nou desde hace 15 años], aunque será un partido muy difícil", dijo Hesp. "No creo que su punto débil sea la defensa. Son todos jugadores muy buenos e lIgner está entre los dos mejores porteros de Alemania"."Me gustaron varios jugadores del Madrid y no creo que en estos partidos la estadística sirva de mucho", apuntó Óscar García. "El Madrid estuvo en su línea", argumentó Ferrer. "Sin hacer un gran partido, puede resolver".

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