Giancarlo Parretti, detenido en EE UU por una demanda de extradición francesa
El empresario italiano Giancarlo Parretti, a quien el Crédit Lyonnais financió en 1990 parte de la compra de los estudios de cine Metro Goldwyn-Mayer (MGM), fue detenido ayer en Los Ángeles por agentes del FBI que actuaban de acuerdo con una demanda de extradición formulada por Francia.La solicitud se basa en una acusación de malversación de fondos del grupo de la industria del cine que Parretti controlaba en EE UU a principios de los años noventa. En el momento de la detención, se encontraba en un despacho jurídico de Los Ángeles al que había: acudido para firmar una declaración. Parretti había llegado a California hace unos días antes, tras un periodo de cuatro años sin viajar a EE UU.
El hombre de negocios italiano fusionó en 1990 su grupo cinematográrico, Pathé, con el histórico estudio MGM. Para llevar a cabo la absorción de laMetro, Parretti pidió un préstamo de 145 millones de dólares (cerca de 18.000 millones de pesetas) a una filial del Crédit Lyonnais, Crédit Lyonnais Nederland Bank (CLNB). En el grupo MGM_ Pathé, Parretti incluyó una compañía de titularidad francesa llamada Europe Image Distribution, a través de la cual, según la solicitud de extradición, desvió sumas de dinero a otras empresas de su propiedad.Parretti, un siciliano nacido en 1941, estaba buscado en Estados Unidos por varias causas y su extradición también h abía sido solicitada por Italia., Se esperaba que durante el día de ayer pasara a disposición del juez Joseph Reichmann. Un tribunal del Estado de Delaware (en la costa este de EE UU) ya le condenó por fraude a finales de 1991, cuando intentaba evitar que le apartaran de la dirección de MGM..
La compra de los estudios cinematográficos fue un sueño de megalómano. Este excamarero metido a empresario siempre había aspirado ser un gran hombre de'cin'e. Sin embargo, el banco que incialmente le avaló, el francés Crédit Lyonnais, le dejó de lado en 1991 y se convirtió en propietario de MGM en mayo de 1992, a través de su filial holandesa CLNB. Esa entidad aún mantiene una demanda contra Parretti a quien acusa de falsificación para obtener los créditos de la compra de los estudios.
El Crédit Lyonnais, cuyas cuentas sufren el peso de cuantiosas deudas, intenta desde en de su entonces recuperar una parte. inversión en la dudosa operación. El banco francés ha comenzado a vender una parte del grupo cinematográfico a pesar de que, según un responsable de MGM que pidió mantener el anonimato, la compañía no tiene el valor que el banco gastó en ella.
Las dificultades de Parreti, que desarrolló sus negocios sobre la base de flujos e intercambios de participaciones entre sociedades de Roma y Sicilia, comenzaron sin embargo en España. En 1988, Parretti tuvo que vender su distribuidora cinematográfica, Cannon, para pagar las deudas de la inmobiliaria española Renta. También tuvo que satisfacer una multa por evasión fiscal y violación de la ley de cambios. Parretti, que había llegado a España atraído por el buen momento bursátil de mediados de los ochenta, tuvo además problemas con el grupo Meliá, que llegó a controlar, y por el que luego ha sido demandado en Italia debido al incumplimiento de obligaciones.
