_
_
_
_
_

"La peste de hoy se llama miedo al paro"

El historiador Jean Delumeau analiza en Madrid las angustias de Occidente

Jean Delumeau, autor de El miedo en Occidente, es historiador medievalista y renacentista, pero mira apasionadamente las angustias colectivas de hoy. "Ahora la peste se llama miedo al paro", dice. Delumeau ve que Occidente necesita una dimensión metafísica, "algo por encima de nosotros".

"El miedo es inherente al hombre, porque la muerte lo es", dice Jean Delumeau, que ha conferenciado en la Casa de Velázquez sobre El Paraíso terrestre. Aunque en El miedo en Occidente se centra en Europa entre 1348 y 1800, Delumeau no pierde de vista las angustias colectivas en el mundo desarrollado de hoy."Ya no tememos la peste, ni las hambrunas", constata. "Pero, incluso por encima del sida, la angustia moderna es el miedo al paro. En Francia, con casi tres millones de desempleados, quien no es funcionario siente ese fantasma amenazador. Hay una depresión colectiva".

En el periodo estudiado por Delumeau los miedos de los europeos oscilaban entre los agentes de Satán (el sambenito que servía para demonizar a musulmanes, judíos, mujeres o brujas) y la espera de Dios (lo escatológico, las profecías apocalípticas). Ambos sentimientos evolucionaron, pero sobreviven de algún modo en el ciudadano actual.

"Occidente vivió siglos bajo el integrismo", dice Delumeau, "y aunque ahora parece haber un rechazo mayoritario de esa concepción y somos la primera sociedad basada en la tolerancia, lo cierto es que pese a nuestra abundancia no tenemos aspecto feliz".

De ahí fenómenos como Le Pen. "Un 15% del electorado apoya muy simplistamente a un líder que sugiere que, con menos inmigrantes, habría más posibilidades para los franceses. La mayoría de los franceses saben que viven bien, aunque miran el porvenir con inquietud".

Delumeau, una vez historiado el miedo, pretende estudiar "los remedios", partiendo de la idea de paraíso terrestre y de la esperanza en el más allá en la historia occidental. "Me inscribo entre los historiadores cristianos", dice, "y creo que Occidente necesita recobrar una metafísica y una ética, algo que esté por encima de esta sociedad que sólo se ve a sí misma". Como medidas prácticas para equilibrar el peso del miedo, Delumeau apunta "ver las cosas con lucidez, y no creer en falsas amenazas", además de abordar la seguridad como un problema básico, en unas ciudades cuya aglomeración provoca angustia y violencia; los gobiernos deben dar marcha atrás en ese concepto de ciudad que llena de tensión París o Madrid, y ha convertido ya en incontrolables México o Sao Paulo". El historiador apunta asimismo la necesidad de plantearse la actual regresión demográfica en Europa: "La contracepción está ahí, y por fortuna. Pero puede usarse bien o mal, y el envejecimiento europeo demuestra que se ha usado mal".

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_