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LA DEFENSA EUROPEA

Un Ejército con traducción simultánea

La brigada franco-alemana genera problemas de integración entre la tropa de ambos países

La brigada mixta franco-alemana tiene su cuartel general en Böblingen, en las cercanías de Stuttgart. Está compuesta por 4.200 efectivos, la mitad de cada nacionalidad. Fue creada en 1987 y empezó a funcionar en octubre de 1989, por lo que acaba de cumplidos años. En este tiempo se ha ganado una valiosísima experiencia admiten todos, pero la enseñanza más importante parece ser que, si a nivel de mandos la cosa puede funcionar, mezclar soldados d diferentes ejércitos en las mismas unidades es algo que sólo puede hacerse en tiempo de paz.

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La propuesta de Helmut Kohl y François Mitterrand de convertir la Unión Europea Occidental (UEO) en el brazo armado de la Comunidad Europea (CE) y de ampliar la brigada franco-alemana para que sea el futuro embrión de un Ejército paneuropeo pilló a todo el mundo por sorpresa, pero más que a nadie al ministro de Defensa alemán, Gerhard Stoltenberg, y a su homólogo francés, Pierre Joxe, que no habían sido informados del contenido del documento. Tal vez por esto, el día antes de la reunión de la UEO en Bonn, ambos visitaron Böblingen.Era un día importante en los cuarteles, y dos comandantes, uno alemán y otro francés, discutían sobre detalles de protocolo momentos antes de la llegada de los ministros. Fourcade, el francés, hablaba en alemán, y Reberling, el alemán, le contestaba en francés. No es reglamentario, pero entre los mandos parece ser la consigna. Entre los soldados es otra cosa, aunque París ha tenido el cuidado de seleccionar una buena parte de su tropa en Alsacia y Lorena, donde se habla un dialecto alemán.

Un experimento para la paz

"Si hay guerra será un caos", asegura el sargento mayor alemán Markus Ettwein; "éste es un experimento para tiempo de paz, y en este sentido está muy bien, pero nuestros equipos son muy diferentes, demasiado. Luego está el problema de la lengua, y en una situación de guerra podría ser un horror".

El teniente Lesage, francés, es de la misma opinión. "El propósito de este experimento es el de aprender a relacionarse, pero no a luchar juntos". sentencia. El soldado Lapierre considera que acabará imponiéndose un Ejército europeo, pero "a nivel de mandos, no mezclando los soldados porque no funciona".

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La plana mayor de la brigada de Böblingen es mixta, así como una compañía, mientras que el batallón de cazadores es alemán y la compañía de caballería es francesa. En los grupos mixtos se aplican las ordenanzas alemanas, mientras -que en los demás imperan las de cada país.

Así, mientras que los franceses pueden beber vino en la cantina y con las comidas, los alemanes son completamente abstemios. Y eso no es todo. En el bosque donde se celebran las maniobras hay dos pequeños campamentos de una decena de tiendas cada uno. En el francés, varios conejos de gran tamaño comen hierba con toda tranquilidad mientras uno de sus congé neres es despellejado por un soldado y otro se dora ya con ajo y romero en el fuego. A menos de 30 metros, los alemanes ingieren sus raciones preparadas de la misma lata. "El movimiento ecologista ha conseguido prohibir a los soldados alemanes que cacen o maten animales", explica el soldado Dacourcy, "no pueden ni pescar en el río, pero nosotros nos atenemos a las reglas francesas y podemos coger una gallina, retorcerle el cuello y comérnosla".

Rigidez francesa

Por el contrario, la Bundeswehr, creada después de la guerra con la intención de romper con la tradición autoritaria prusiana, es un ejército de ciudadanos, donde los soldados conservan todos sus derechos y el trato no es el tradicional en la milicia. "Tenemos una actitud más relajada con respecto a los mandos que los franceses", comenta el oficial cadete Bercher; "ellos son mucho más rígidos y autoritarios". Bercher es banquero, y como universitario realiza las prácticas como oficial.

La presencia de un oficial alemán banquero explica muy bien la sutil diferencia entre los dos países. Para los franceses, éste es un destino de prestigio por el que reciben un 35% extra sobre su paga. Para los alemanes, que cobran menos, es un destino normal. La brigada está situada en una de las regiones más ricas de Alemania. Como decía el soldado Labadie, "nunca en mi vida había visto tantos Mercedes y BMW, y tanta riqueza".

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