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José Ramón Alvarez Rendueles planteó a 'los Albertos' su incompatibilidad con Romualdo García Ambrosio

José Ramón Álvarez Rendueles forzó el cese fulminante de Romualdo García Ambrosio en la mañana del pasado jueves al plantear a los Albertos su incompatibilidad con el hasta ahora consejero delegado de Grucycsa. La primera reacción de García Ambrosio nada más ser informado de su relevo consistió en recurrir a las hermanas Koplowitz, quienes hasta ese momento no tenían conocimiento alguno de lo ocurrido.El equipo directivo de Grucycsa, encabezado por Alberto Alcocer y Alberto Cortina y en el que participan los distintos responsables de las compañías del holding, se reunió el miércoles pasado y decidió la conveniencia de sustituir a Romualdo García Ambrosio. Ni éste ni Miguel Boyer, presidente de Cartera Central, asistieron al encuentro, celebrado en el más estricto secreto.

La reunión del consejo de administración de Grucycsa no hizo sino ratificar la decisión con el respaldo de todos los miembros del máximo órgano de gobierno, a excepción de Miguel Boyer quien prefirió abstenerse. No obstante, por razones de cortesía, Alberto Alcocer había informado una hora antes a García Ambrosio.

Según las citadas fuentes, Romualdo García Ambrosio concertó inmediatamente un encuentro con Alicia y Esther Koplowitz, a las que informó de lo sucedido. Hasta entonces, ninguna de las dos principales propietarias del grupo Construcciones y Contratas conocían lo ocurrido, si bien eran conscientes del interés que, desde hace fechas, tenían sus maridos en desprenderse de quien ha llevado en los últimos meses el timón del holding. En realidad, la pérdida de confianza de los Albertos en García Ambrosio era notoria desde hace unos meses, cuando fue considerado como el principal responsable de que todavía no se haya podido alcanzar un acuerdo con las hermanas Koplowitz. El planteamiento de Álvarez Rendueles, realizado a través de una carta "durísima" contra García Ambrosio, ha sido la gota que ha terminado por desatar las hostilidades. El presidente del Banco Zaragozano no aceptaba la intromisión del consejero delegado de Grucycsa en el funcionamiento de la entidad que él preside. Además, el Banco Zaragozano estaba destinado a convertirse en el feudo de Alberto Alcocer y Alberto Cortina si éstos hubieran conseguido cerrar un convenio de reparto patrimonial con sus mujeres, lo que ha provocado en las últimas semanas un verdadero cerco sobre la gestión de Álvares Rendueles.

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