La asociación europea de teólogos rechaza un enfrentamiento con el Vaticano

Unos 70 profesores de Teología de siete países europeos han acordado constituir una asociación internacional que agrupe a los profesionales de esta materia en el continente. La decisión, aprobada por unanimidad en la reunión mantenida el pasado domingo y ayer, lunes, cerca de Wisbaden (RFA), no quiere ser un desafío a la jerarquía católica.

Sin embargo, se trata de un hecho sin precedentes en la Iglesia que ha sido propiciado por la aparición -el pasado mes de enero- de la llamada Declaración de Colonia, en la que los teólogos criticaban los excesos de autoridad del Papa y proponían pluralismo en temas de moral.Los organizadores del encuentro de Wiesbaden, entre los que figura el profesor de Tubinga Norbert Greinacher, dieron ayer a conocer que hasta el momento se han sumado al célebre manifiesto crítico 485 teólogos europeos, así como 16.000 laicos y sacerdotes y más de 100 grupos y asociaciones. "Esta reacción muestra que son muchos los que buscan un atmósfera propicia para la palabra abierta en la Iglesia", se señala en un comunicado dado a conocer a mediodía de ayer.

Una de las contribuciones a la búsqueda de esa apertura es la creación de la asociación, que tendrá su base organizativa en Tubinga. "Para esta sociedad teológica se da por sobrentendido el diálogo libre, la exigencia científica y el servicio para toda la Iglesia", según los organizadores, que pretenden que los debates superen el marco de la declaración de Colonia y aborden temas sociales. Asimismo, la nueva asociación se compromete a favor de "una Iglesia abierta y de acuerdo con el evangelio, por el ecumenismo y la justicia a nivel internacional".

No a la ruptura

Los reunidos han querido con esta orientación poner la primera piedra para la constitución del colectivo de teólogos, que ya cuenta con un comité internacional integrado por representantes de la RFA, Francia, España, Suiza, Holanda, Austria y Bélgica. La asociación no será del agrado de Roma, a juicio de algunos de sus integrantes, que piensan que probablemente el Vaticano lo juzgue como un desafío.Sin embargo, los teólogos no quieren que se les acuse de romper el diálogo. Por ello se manifestaron partidarios de mantener contactos con la jerarquía eclesiástica, y especialmente la alemana, cuya nacionalidad tiene la mayoría de los que alientan la iniciativa de Wiesbaden.

Por ello han propuesto ya iniciar un diálogo con el presidente del episcopado alemán, Karl Lehmann. Precisamente ayer, este obispo tenía que recibir a una comisión de teólogos, pero ".un malentendido" no permitió que llegara a celebrarse la reunión.

Ésa fue al menos la causa oficial de la suspensión del encuentro, en la que algunos ven la rnano de Roma o de los propios compañeros de episcopado de Lehmann. Oficialmente, los teólogos dijeron: "Se ha intentado el diálogo, pero, por desgracia, no ha sido posible por el momento".

La cancelación de la entrevista cayó como un jarro de agua fría en el foro de teólogos, que en sus dos días de trabajo no ha podido debatir todos los temas previstos en el orden del día. Sí han abordado el juramento de fidelidad que exige, de acuerdo con el derecho canónico, Roma. "Este texto se ha redactado sin el conocimiento de las conferencias episcopales", según el profesor de Tubinga Dietmar Mieth.

Por ello, los teólogos lo estudiarán con profundidad y pedirán información "para que no tenga efectos perniciosos sobre nuestra actividad", según Mieth, quien añadió que debe potenciarse la solidaridad entre los teólogos, que son personas "con responsabilidad adulta".