_
_
_
_
_

Pasar el Rubicón de puntillas

La OLP por fin se ha decidido a pasar el Rubicón de puntillas. Después de años de rechazos, meses de dudas y algunas noches de discusiones, Yasir Arafat y sus amigos han aceptado, con una gran mayoría, la resolución 242 del Consejo de Seguridad como "base de una conferencia internacional de paz". Lo ha hecho sin reservas, pero ha añadido a este célebre texto una demanda esencial según su opinión: la garantía de los derechos nacionales del pueblo palestino, especialmente su derecho a la autodeterminación. Anunciada al mismo tiempo que la proclamación, simbólica, de un Estado palestino independiente, esta decisión representa un éxito personal innegable para Arafat, tanto como una victoria de la OLP sobre sí misma. La central palestina parece renunciar al dogmatismo y a la violencia verbal que fueron muchas veces la capa de su impotencia. Al aceptar la resolución 242 se coloca como parte indispensable ante la opinión internacional y frente a EE UU, para quien este texto constituye la piedra angular de toda negociación en Oriente Próximo. El Gobierno actual del otro lado del Atlántico y, sobre todo, el futuro, Juzgará lo suficientemente significativas de su buena fe las iniciativas de la OLP Las recientes declaraciones de Yasir Arafat legitimando ciertas formas de violencia y comparando a Israel con un Estado racista han causado en Washington una mala impresión., 16 de noviembre

Cuando un tema da mucho que hablar, lee todo lo que haya que decir.
Suscríbete aquí

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_