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Defensa pondrá a la venta el Centro Cultural de los Ejércitos de Barcelona por 1.500 millones

Enric González

El Ministerio de Defensa pondrá a la venta en las próximas semanas el edificio que hasta ahora albergaba al Centro Cultural de los Ejércitos de Barcelona en la plaza de Catalunya, por un precio mínimo de unos 1.500 millones de pesetas al contado, aunque se espera alcanzar un precio superior a los 2.000 millones.

Hasta ahora han sido presentadas cuatro ofertas, una de las cuales corresponde a la empresa de grandes almacenes El Corte Inglés, según confirmaron fuentes de la propia sociedad.Fuentes gubernamentales no quisieron detallar la personalidad de los otros tres compradores, pero subrayaron que "dos de ellos son de. absoluta. solvencia, aunque no se trata de entidades bancarias".

El Centro Cultural de los Ejércitos de Barcelona, situado en el número 15 de la plaza de Catalunya, pertenece, según sus estatutos, al "Estado (Ramo de Guerra)", y su finalidad era hasta ahora, según el mismo documento, "estrechar los lazos de unión y de compañerismo entre los componentes de las Armas, Cuerpos e Institutos de los tres Ejércitos; establecer una cordial unión con personas del elemento civil que se distingan por su acendrado patriotismo y amor a las instituciones armadas y fomentar el desarrollo de la cultura, especialmente en el arte y ciencia de la guerra". Según un portavoz del Ministerio de Defensa, la utilidad del centro ya no existía y la asistencia de socios se había reducido a unas pocas personas.

Regulación de empleo

El centro cuenta con 21 trabajadores declarados y una docena en situación irregular, según los empleados, del ramo de hostelería y sin vinculación con el Ejército. Los empleados han recibido ya una notificación del expediente de regulación de empleo que les afecta a todos. La indemnización que percibirían sería la mínima establecida legalmente (20 días por año de antigüedad), lo que supondría cantidades bajas, dado que el nivel salarial medio no alcanza las 75.000 pesetas brutas mensuales. Los empleados reclaman "ser traspasados a otros establecimientos militares o a la empresa compradora, porque de lo contrario se nos condena al paro". También afirman que la. institución ha sido relegada por el Ministerio de Defensa en los últimos años, "nombrando directivos sin capacidad y dejando, languidecer los distintos servicios del centro, para que la venta fuera justificable". Según ellos, el centro es aún buen negocio y se autofinancia, "si tenemos en cuenta el bajo coste de los empleados y los ingresos, por publicidad en la azotea y los alquileres de la planta baja".El Centro Cultural de los Ejércitos cuenta, según un folleto de información, con una cafetería, el Club San Jorge, en la planta baja; un salón de actos y un salón noble; una biblioteca con 10.000 volúmenes; servicio de peluquería; un bar, una sala de televisión, una sala de ajedrez, una sala de billar, una sala de proyecciones cinematográficas, un comedor con servicio de cubierto y carta; locales donde se imparten clases de esgrima, yudo y karate, y cursos de ingles y francés. En los últimos tiempos, sin embargo, los servicios se han deteriorado sensiblemente y han ido desapareciendo "por falta de medios", según los empleados. Diversos objetos de valor (cuadros de firma y muebles antiguos, entre otros) pertenecientes a la entidad han sido trasladados, por otra parte, a las dependencias de Capitanía General, donde permanecen en depósito mientras se consuma la venta del inmueble. La disolución de la sociedad explotadora del Centro Cultural de los Ejércitos se aprobó el 25 de septiembre del año pasado, en reunión de la Junta General Extraordinaria, compuesta por las máximas autoridades de la V Región Militar. La decisión se justificó, según consta en acta, por "la orden recibida del mando" y fue aceptada unánimemente. En la actualidad, la mayoría de los militares destinados en Barcelona acude a otro centro en Castelldefels.

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