James Goodby: "Antes de 1986 habrá acuerdos en la Conferencia sobre Desarme en Europa"

"Hay excelentes contactos con los soviéticos. Estuve en Moscú la semana pasada y puedo asegurarle que hay muy buenas comunicaciones. No traje ningún acuerdo, ya que no era ese el propósito, pero no hay problemas en este sentido". Así se expresó, en una entrevista concedida en Bruselas a EL PAIS, James Goodby, jefe de la delegación estadounidense en la Conferencia sobre Desarme en Europa (CDE), cuya segunda fase se abre en Estocolmo el martes, 8 de mayo. Treinta y cinco países firmantes del Acta Final de Helsinki en 1975 participan en este foro, en el que se negocian medidas de creación de confianza y seguridad. Goodby cree que es posible lograr un acuerdo "bastante antes de 1986".

Esta segunda fase estará fundamentalmente destinada a cuestiones de procedimiento. El mundo exterior puede pensar que "los diplomáticos están de nuevo discutiendo sobre la forma de la mesa, pero eso es también un elemento sustancial, y quien lo desprecie se equivoca". Goodby cree que al negociar la agenda o sistema de trabajo se negocia "la lógica de la negociación". Considera que la muerte de Yuri Andropov y la llegada de Konstantín Chernenko no cambian en nada la situación.Los países de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) darán en esta fase "más detalles sobre su postura, que aún no hemos revelado en la negociación, y probablemente los soviéticos harán lo mismo, pues hasta ahora no han dicho gran cosa sobre qué propuestas concretas tienen. Pero las tienen. Las han identificado, y se refieren a notificación por adelantado de movimientos militares y otros temas".

Goodby preconiza, pues, comenzar a negociar centrándose en las áreas donde existe un cierto grado de acuerdo. En cuanto a otras propuestas, Goodby "no excluye" el discutirlas, pero "lo principal es ver si podemos lograr acuerdos lo más rápidamente posible".

Intenciones

"Todas las negociaciones sobre armarnentos han tratado, de reducir o congelar los medios disponibles. Pero sólo en muy raras ocasiones hemos hablado de las intenciones", considera Goodby. "Teniendo en cuenta nuestra opinión sobre el modo en que puede comenzar la guerra en Europa -a través de un incidente-, debemos centrar nuestra atención en el extremo más bajo de los conflictos... Y por tanto, nuestras propuestas versan sobre fuerzas que salen de sus cuarteles y toman posiciones sobre el terreno". En esta conferencia "deberíamos ser capaces de hacer lo que ninguna otra conferencia hace, a saber: tratar de las causas de la guerra. Y entre estas causas están los accidentes, los errores de juicio y de percepción causados por el hecho de que hay cierta confrontación en Europa. Hay muchas fuerzas, y de cuando en cuando cierta niebla sobre lo que pueden ser las intenciones. Puede darse una situación en la que un incidente no deseado dispare una escalada y convertirse en fuente de un conflicto sobre el que se perdiera el control".

"Queremos comprender", explica el embajador norteamericano, "las intenciones con una mayor precisión, pero no en el modo general en que los soviéticos lo proponen, diciendo que no tenemos la intención de atacarles. No la tenemos. Lo que sí se puede hacer es disponer de un sistema por el cual cada parte asegure a la otra del significado de una maniobra u operación militar específica. Entonces se habrá logrado algo para clarificar las intenciones, reducir las suspicacias, hacer más improbable un error de cálculo o deshacer las ilusiones de la posibilidad de un ataque por sorpresa. Aumentaría de esta forma la estabilidad".

El 'télex de la distensión'

Una propuesta concreta es la llamada multilateral hot line (línea directa o teléfono rojo multilateral) entre los 35 países firmantes, que algunos han llamado también el télex de la distensión, destinado a crear un canal de comunicación rápida y simultánea. Tras acordar unas medidas concretas, "si se plantea algún problema sobre su aplicación se nos ha ocurrido que una hot line que conecte a los 35 países, como un circuito de conferencia, sería útil para pasar información urgente... Este sistema se ultilizaría para preguntar o señalar un hecho. Por ejemplo: hemos visto desplazarse tres divisiones, ¿qué significado tiene?". Debe ser una comunicación rápida. Además, Goodby está pensan do en "acciones de remedio" a tomar en caso de violación de un acuerdo, pero aún no ha elaborado del todo esta idea. En cualquier caso, insiste en que este télex de la distensión no puede ser independiente de los acuerdos; "antes hay que crear una estructura", o, como comentaba otra fuente atlántica, "no se puede usar este canal de comunicación para señalar sólo una intención general de no hacer uso de la fuerza".

Del ambiente general entre el Este y el Oeste, con los euromisiles y otras cuestiones, dependerá el progreso de la CDE, que, según fuentes atlánticas, puede servir de plataforma propagandística a la URSS. Estados Unidos no quiere limitarse a declaraciones generales, aunque Goodby no las rechaza de plano, siempre y cuando se haya llegado antes a acuerdos sobre medidas específicas de confianza. Para Goodby, un acuerdo en la CDE podría tener un impacto en otras negociaciones. Goodby afirmó que en Estocolmo norteamericanos y soviéticos no han hablado "en las negociaciones propiamente dichas" de los temas nucleares.

El pasado jueves, en la sede de la OTAN en Bruselas, la reunión del Consejo Atlántico, que contó con la presencia de los embajadores en la CDE, intentó fraguar una estrategia común. "Hay detalles en los que se registran diferencias, pero son poco importantes, y desde luego, no son fundamentales para las conversaciones que se celebrarán este año". "Hay un grado muy alto de unanimidad", señala Goodby, y además lo interesante es que los países neutrales comparten el enfoque básico de la OTAN".

Goodby no parece haber traído gran cosa de su visita a Moscú, pero insiste en que "los soviéticos van en serio en esta conferencia".