Gabriel Camuñas acusa a José María Calvíño de incompetencia para el ejercicio del cargo

La sesión de la tarde se inició con el turno de respuestas del director general a las preguntas formuladas por la mañana por los distintos portavoces. Pese a la tónica de moderación del parlamento del director general, el debate más vivo se produjo tras la intervención del representante del Grupo -Popular, Gabriel Camuñas, quien le dijo que "su conducta demuestra su incapacidad para el ejercicio del cargo de director general".

Iñigo Aguirre intervino por la Minoría Vasca y calificó de "perfectas" las explicaciones del director general, aunque comentó, que le parecían más bien las de un director económico-financiero. Las minorías nacionalistas, en opinión del diputado vasco, sufren una "marginación real y notable" en los espacios informativos de ámbito estatal. Para Iñigo Aguirre, en el caso de Euskad' sólo se interesan por la "violencia, asesinatos, chantajes e impuestos revolucionarios".Calviño dijo que el martes, sin ir más lejos, Ramón Labayen tuvo ocasión en televisión de hacer las críticas "más acres y directas" al Gobierno; que mandaría una copia de la infraestructura humana y técnica del ente al diputado vasco y que en el curso de este año se pretende que el segundo canal llegue al 84% de la audiencia teórica posible.

Gabriel Cisneros y José Miguel Bravo de Laguna hablaron en nombre de UCD. Cisneros, quien por la tarde dijo que "el mérito de la intervención de Calviño es, junto a su fluidez verbal, la amplitud y vaguedad de sus referencias culturales, ciertamente deslumbradoras", felicitó a Calviño y calificó de "satisfactorias" sus explicaciones sobre la gestión empresarial, pero le dijo que los españoles quieren saber por qué sale cada día lo que sale" y que "no se pueden echar todas las culpas hacia atrás con la perspectiva psicológica del beneficio del inventario. Para lo bueno y lo malo", añadió Cisneros, "tienen que sentirse parcialnlente solidarios con las gestiones anteriores". El representante centrista concluyó con una cita al monje Columbano para aconsejar al director general que no se dedique a la alabanza perenne a la Administración socialista.

Bravo de Laguna se refirió a algunos programas que TVE emitió sobre el aborto, del que dijo que era una forma de legitimar posteriormente el proyecto de despenalización del Gobierno; el informe sobre militares republicanos, que según él, el propio Ministerio de Defensa calificó de imprudente; las manipulaciones que se efectuaron en una alocución papal sobre el aborto y la preponderancia de la información gubernamental en los telediarios. Asimismo, acusó de "sectarias" algunas actuaciones del director general, se interesó por saber desde cuando conoce a Alfonso Gurra, si va a haber congelación salarial en RTVE y el por qué de algunos nombramientos de militantes socialistas en Prado del Rey.

Lodos y ladrillos

"Hemos heredado Iodos, pero también ladrillos", respondió el director general a Cisneros. "Asumo mi herencia y seré fiel cumplidor de los compromisos de mis antecesores, pero nadie puede impedirme que haga un inventario de lo que he recibido. Estoy pagando aún royalties de películas que pusieron cuando Juan José Rosón era director general".Josep López de Lerma, de la Minoría Catalana, preguntó qué dificultades técnicas existen para la puesta en marcha de los terceros canales autonómicos y qué entiende por "visión antropológica del tercer canal de Cataluña". Asimismo, añadió que los telediarios son "escaparate de ministros y púlpito gubernamental". Calviño contestó que quienes no hubieran entendido lo de la "televisión antropológica" demostraban no haber leído a Lévy Strauss ni a Schumpeter.

Gabriel Camuñas, del grupo popular, dijo a Calviño que, a juzgar por sus profusas declaraciones a la Prensa, es director desde hace tres años y que su "retahíla de cifras no tiene valor; juzgaremos a finales de año si se han reducido esos gastos". El diputado aliancista le recomendó: "No trabaje usted tanto, no le suceda lo que a BaIbín y nos quedemos sin programación. Nunca en tan poco tiempo se han cometido tantos errores y arbitrariedades. En estos momentos TVE es la menos plural, la menos democrática y la más gubernamentafizada de las televisiones de los países occidentales". Asimismo, se interesó por los trabajadores despedidos de Radio Cadena y afirmó que se había impedido dar información de este conflicto en los telediarios. "Tal conducta", alegó Camuñas, "demuestra su incapacidad para el ejercicio del cargo".

Camuñas enumeró una larga serie de programas en los que se propugnaron, según él, la despenalización del aborto y "se glorificó, en ocasiones, la homosexualidad". En este punto dijo que en el espacio Buenas noches, de Mercedes Milá, se dijo que un 10% de los españoles son homosexuales y que el 40% habían practicado la homosexualidad alguna vez. "Le puedo garantizar, señor Calviño, que esa proporción no se da en nuestro grupo parlamentario". Ante las risas de los asistentes, el diputado aliancista añadió: "Y tampoco se da en los demás grupos".

Gabriel Camuñas se refirió, asimismo, a la intervención, en el mismo programa, de "doña Juana Ginzo, cuya simple presencia es un atentado contra la estética"; protestó por la emisión del informe sobre los militares republicanos y preguntó cuántos programas, en la historia de TVE, se han suspendido por la enfermedad de su presentador o sus locutores. Aquí intervino el socialista Guillermo Galeote, quien dijo: "Espero que el liberal Camuñas no sea nunca director general de RTVE, porque nos llevaría a la Edad Media y a la Inquisición".

"Yo también tengo muchas declaraciones a la prensa del señor Camuñas, en las que anticipa hasta tal punto su actitud de hoy que me ha sido muy fácil prepararme las respuestas", contestó Calviño. "En el programa sobre el aborto, el médico que intervenía por Alianza Popular dijo que su intervención fue grabada un mes antes, lo que demuestra que yo no lo planifiqué. Lo visioné y, al ver aquellos niños tan bellos jugando en una plaza con las palomas, aquello se me quedó en la retina y lo interpreté como un canto a la vida".

José María Calviño pidió un tiempo para ser juzgado; insistió en que siempre ha defendido a los trabajadores y luchará porque no descienda su poder adquisitivo; negó haber dado órdenes para que no se informara del conflicto de Radio Cadena y explicó la desaparición del programa 300 millones porque costaba mucho dinero, no se oía y había irregularidades que han llevado a una intervención del Tribunal de Cuentas del Reino.

El grupo socialista fue el único satisfecho con la intervención del director general, y en particular su portavoz, Guillermo Galeote, resaltó que el saneamiento del ente es lo más trascendental que se había expuesto. Ana Balletbó calificó las afirmaciones de Camuñas como "terrorismo verbal".