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El Valencia Basket destituye a Álex Mumbrú antes de acabar su segunda temporada

El equipo, que se había desinflado estrepitosamente en las últimas semanas, pasa a manos de un joven técnico valenciano, Xavi Albert

Álex Mumbrú, el pasado 27 de marzo.
Álex Mumbrú, el pasado 27 de marzo.ANDREJ CUKIC (EFE)

La dolorosa derrota por casi 30 puntos (69-98) frente al Asvel francés, el jueves, fue la sentencia definitiva para Álex Mumbrú. Desde la presentación, el público del pabellón de la Fuente de San Luis mostró su descontento hacia el entrenador catalán -también contra el director deportivo, Luis Arbalejo- y durante el partido se escucharon gritos pidiendo su marcha. Era una muerte anunciada, y el Valencia Basket ha comunicado esta mañana la destitución del técnico catalán, que no ha logrado acabar la segunda de las tres temporadas que tenía, por contrato, al frente de un equipo que no termina de redondear su proyecto. El sustituto será un hombre de la casa, Xavi Albert, un joven entrenador de 36 años que hasta ahora estaba como asistente de Mumbrú.

El ya exentrenador del Valencia Basket llegó al club de Juan Roig en el verano de 2022. Mumbrú dirigió al equipo durante 133 partidos en los que hubo más derrotas (70) que victorias (63) y deja al Valencia Basket al borde de la eliminación en la Euroliga, con las semifinales de la Copa del Rey y un decepcionante séptimo puesto en la Liga ACB, con los playoffs en peligro. El jueves, después del duro traspié en Europa, dejó una frase en la que mostraba su comprensión por el enfado de la hinchada. “Me siento con fuerzas, sí, pero hoy ha sido el peor partido y hay que pedir disculpas a la afición por no estar a la altura”, dijo en la rueda de prensa posterior al partido.

El club ya había dado un golpe de timón en junio de 2023, cuando despidió a Chechu Mulero, que había sido el director deportivo desde 2014. La plantilla diseñada por su sustituto, Luis Arbalejo, estaba llena de novedades, jugadores muy fuertes físicamente para aguantar el ritmo de alternar la Liga ACB con la Euroliga. Las primeras jornadas fueron prometedoras. El equipo, con una de las mejores defensas del continente, se abría paso como un rompehielos, pero, poco a poco, fue perdiendo su identidad y las derrotas pasaron a imponerse a las derrotas. El equipo comenzó a caer en la clasificación de las dos competiciones y la afición vio que, un año más, el proyecto se desmoronaba.

A la entidad, que tiene como director general a Enric Carbonell, le cuesta dar con la tecla del éxito desde de la sorprendente marcha de Pedro Martínez después de conquistar la primera y única Liga ACB de la historia del Valencia Basket en 2017. Al técnico campeón le sucedieron Txus Vidorreta, Jaume Ponsarnau, Joan Peñarroya y Álex Mumbrú, cuatro entrenadores que no lograron triunfar en un banquillo tan misteriosamente complicado como el valenciano. No ayuda a tener paciencia el avance de las obras del Roig Arena, la fastuosa instalación que se convertirá, en 2025 o 2026, en la nueva casa del equipo y que tendrá un aforo de 15.500 espectadores, un arma de doble filo si el Valencia Basket no logra enamorar a su público. Desde el entorno del club se da por hecho que la inauguración del Roig Arena puede traer a Valencia la Copa del Rey y la Final Four de la Euroliga, y que el mecenas sueña con un gran equipo que pueda estar en las dos competiciones.

La plantilla del Valencia Basket queda ahora en manos de Xavi Albert, un entrenador del que se espera mucho en Valencia desde que, en el verano de 2022, fue invitado por los Portland Trail Blazers a participar como ayudante en la Summer League de la NBA.

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