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El rompecabezas de Xavi: dos laterales y Bernardo Silva para completar el Barcelona

El entrenador culé busca las últimas piezas para armar un equipo que reconquiste el Camp Nou

FC Barcelona
Xavi Hernández da instrucciones en un descanso para hidratarse durante el partido de la primera jornada entre el Barcelona y Rayo Vallecano el sábado en el Camp Nou.Quique García (EFE)
Ramon Besa

Hay dos imágenes tristes que el sábado unieron de alguna manera al Etihad Stadium con el Camp Nou. A un lado, en Mánchester, Bernardo Silva era el último jugador en abandonar la cancha después de saludar a los aficionados y entregar su camiseta a un hincha del City. El compañero Roger Pascual incluso escuchó una voz de uno de los seguidores que aplaudían al portugués: “¡Visca el Barça, Bernardo!”. La liturgia sonó a despedida de un futbolista que solo ha disputado 37 minutos contra el West Ham y el Bournemouth. El suplente Bernardo Silva seguramente llegó a tiempo para ver luego por televisión el partido que al otro lado, en Barcelona, disputaban los azulgrana contra el Rayo y que acabó con el lamento de Xavi: “Ha sido una lástima y estoy decepcionado; empezar así no es lo mejor”, argumentó el entrenador tras el 0-0. Xavi y Bernardo Silva esperan compartir equipo muy pronto porque el técnico quiere fichar a un centrocampista que se deja querer después de perder protagonismo en el equipo de Guardiola.

El partido contra el Rayo Vallecano confirmó con independencia del resultado las necesidades que todavía tiene el equipo azulgrana a juicio de Xavi. El técnico precisa de un segundo interior que procese el juego como Pedri. El tinerfeño es el único de la plantilla que tira el hilo del pase y no juega de espaldas ni de cara a la pelota sino que sabe girar para orientar el juego, un volante tan imprescindible como frágil por las lesiones, ausente en 33 partidos de la pasada temporada, sustituido el sábado por molestias contra el equipo de Iraola. Necesita ayuda y Bernardo Silva parece mejor acompañante o sustituto que Frenkie de Jong, Gavi, Pjanic o Kessié, medios más físicos y que se mueven mejor en la conducción, el choque o en el cuerpo a cuerpo, distintos de Pedri. Bernardo Silva y Pedri vendrían a ser una pareja inspirada en el dúo Xavi-Iniesta en un equipo que aspira a recuperar la finura y la velocidad de balón, la buena elaboración y el juego a un toque que tanta identidad le dio en su momento al Barcelona de Guardiola.

Aunque remató más que el Rayo (21 tiros contra cuatro), tuvo más posesión (67%-33%) y hasta cometió más faltas (16-14), el Barça no estuvo preciso ni efectivo y concedió las ocasiones suficientes como para poder perder el encuentro del Camp Nou. La intervención de un recuperado Ter Stegen fue decisiva para un equipo reiteradamente vulnerable en los costados por la falta de laterales clásicos, desbordado Araujo y desenfocado Jordi Alba. Xavi constató también que es imprescindible contratar a un zurdo como Marcos Alonso y a poder ser un diestro, puesto al que oposita Bellerín, un exazulgrana actualmente en el Betis. Ni Dest ni Sergi Roberto parecen ser soluciones definitivas para Xavi, que en ocasiones ha preferido desplazar a Araujo y se supone que también lo hará con Koundé. El problema es que para inscribir al central francés procedente del Sevilla y contratar a Marcos Alonso y Bernardo Silva, además de un lateral derecho, el Barça necesita vender y/o renegociar los contratos de sus capitanes Busquets y Piqué.

La lista de bajas

La sala de espera cuenta con tres delanteros transferibles o con opciones a salir: Braithwaite, Memphis Depay y Aubameyang. También hay un centrocampista: De Jong. Y, naturalmente, defensas: Umtiti y Dest. Las posibilidades aumentan desde que el club aplicó las cuatro palancas y se rige por la regla del uno por uno: por cada euro liberado puede utilizar otro para incorporar más jugadores a los ya reclutados: Lewandowski, Koundé, Kessié, Christensen y Raphinha. Los cuatro no tuvieron un buen debut contra el Rayo —Koundé no jugó por no estar inscrito— pese a su empeño, especialmente Lewandowski, que jugó como si todavía fuera el delantero centro del Bayern de Múnich.

El polaco, que había marcado en la primera jornada de las últimas siete temporadas, no se pudo estrenar como artillero en su debut oficial con el Barça. Aunque tuvo sus oportunidades, no conectó con los centros de Dembélé y Raphinha ni tampoco los centrocampistas le filtraron pases para poder encarar a Dimitrievski. La marca de Catena y las ayudas de Isi en las jugadas de estrategia —alguna digna de ser sancionada— secaron a Lewandowski. Nadie tiene dudas en cualquier caso sobre el 9.

También resultó esperanzadora la actuación de Ansu Fati. Tuvo media hora interesante e incluso remató con tino y también sin suerte al arco del Rayo. Ningún futbolista pudo solucionar a título individual el problema del juego colectivo del Barça. Al equipo le pierde la urgencia de querer marcar sin necesidad de tejer la jugada, corre mucho y piensa poco, no ataca bien y defiende mal, aspectos que obligan a intervenir a Xavi.

El preparador parece haber identificado a los jugadores que necesita para armar por fin un equipo y plasmar un plan que de momento aún no se ajusta al que se le suponía como capitán que fue del mejor Barcelona. Xavi, sin embargo, siempre se distinguió por la paciencia, confianza y lectura del juego, la misma que ahora le lleva a pensar que con Bernardo Silva todo sería más fluido y menos directo, más armónico y afín al estilo del Barça.

Técnico y jugador están citados de momento para el día 24 cuando el City visitará el Camp Nou en el partido impulsado por Unzué en la lucha contra el ELA. No se sabe si para entonces ambos ya formarán parte del mismo equipo y por tanto de un Barça que de momento se parece demasiado al de la temporada pasada incluso con Lewandowski y sin Piqué.

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Sobre la firma

Ramon Besa
Redactor jefe de deportes en Barcelona. Licenciado en periodismo, doctor honoris causa por la Universitat de Vic y profesor de Blanquerna. Colaborador de la Cadena Ser y de Catalunya Ràdio. Anteriormente trabajó en El 9 Nou y el diari Avui. Medalla de bronce al mérito deportivo junto con José Sámano en 2013. Premio Vázquez Montalbán.

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