Koke manda en su barrio
El Atlético se impone al Rayo en Vallecas con un gol del volante tras un gran pase de João Félix, que vuelve a ser el mejor de los colchoneros en un partido de faena
No es fácil jugar en Vallecas, de donde el Atlético salió victorioso porque entendió lo que requiere ese campo. No se desordenó, evitó la ida y vuelta que tanto le va al Rayo y golpeó con una jugada de precisión de João Félix que no desperdició Koke. El crecimiento del portugués lo refrendan su protagonismo, su determinación y su brillo en partidos de pico y pala como el de anoche. Su pareja con Griezmann resulta incómoda para los rivales.
No le importó a Simeone replicar la alineación que conquistó Old Trafford. La presión por alcanzar un puesto en la próxima Liga de Campeones no admitió rotaciones en la cabeza del preparador argentino. Su grado de satisfacción con la interpretación de su libreto por parte de los once que noquearon al United fue tal que no le importó el desgaste ante el alto voltaje que suele imprimir el Rayo en Vallecas.
El apelotonamiento de futbolistas que provocan las dimensiones del campo obliga a un juego vivo. En Vallecas o se juega a dos toques o se imponen las conducciones cuando se abre campo. No hay otra. Lo sabe el Rayo y trató de entenderlo el Atlético desde el arranque. Al minuto, un globo de Koke lo cazó en una semivolea forzada Griezmann que atajó Dimitrievski. Las jugadas de estrategia lejanas también son una solución rentable. Una la tocó de cabeza hacia atrás João Félix y no la aprovechó Griezmann por medio dedo. El luso está en un punto de competitividad que hasta hace de peluquero con acierto para peinarle los balones a los desmarques al espacio Griezmann. Los giros, los controles y las conducciones limpiando rivales que hizo forman parte de su talento natural. La continuidad que la da al juego y las faltas que provoca para que su equipo pueda salir son impagables ahora mismo.
Las batallas en el centro del campo a partir de rechaces son otro de las vías de éxito en Vallecas. Ninguno de los dos se impuso con claridad en ellas. El Rayo empezó a emerger cuando pudo encontrar a Trejo en la mediapunta. El conjunto de Iraola se encontró con la recuperada sobriedad defensiva de los de Simeone. No concedió transiciones para la conexión de Fran García Álvaro García ni para Bebé. Sergio Guardiola fue un islote tomado por Savic, Giménez y Reinildo. Este se sintió cómodo en el escenario vallecano. Hasta se atrevió a alguna aventura con. También mantuvo su crecida De Paul, cada vez más fino y activo con la pelota.
No se rompió el partido en todo el primer acto porque ninguno de los dos equipos se desabrigó, conscientes de que cualquier error de posición podría abrir un boquete y el primer acto se cerró sin goles.
Aguantar la renta mínima
Se abrió el duelo tras el gol del Atlético al poco de la reanudación. De Paul rememoró sus tiempos de extremo ganando la línea de fondo con una pisadita y su centro pasado se lo entregó Koke a João Félix. El luso ajustó tiempo y precisión para dejar a Koke perfilado para cruzarle la pelota a Dimitrievski. El capitán celebró su primer tanto del curso en su barrio y no pudo reprimir reivindicarse señalando su nombre en la camiseta con los pulgares. Sus primeros dos tercios de temporada estuvieron muy alejados del nivel que recuperó como manija del equipo campeón. Contra el United ya enseñó su mejora y anoche la mantuvo.
El Rayo quedó paralizado por el golpe durante varios minutos. La laguna pudo costarle el segundo gol. De Paul dejó solo a Griezmann, que optó por el disparo seco al cuerpo de Dimitrievski con João Félix libre al otro lado. De esa jugada emergió un Rayo más incisivo. De un barullo en el área, Mario Suárez sacó aprovechó para engatillar un golpeo abajo y esquinado al que reaccionó felino Oblak. El esloveno también se ha ido enderezando en la medida que sus defensas han ganado en solidez. Comienza a ser decisivo y a ser ese portero gana punto con más continuidad.
Creció el equipo de Iraola y Simeone entendió que debía oxigenar a un conjunto muy exigido por la cita europea del martes. Sentó a João Félix, Herrera y Lodi de una tacada para darle carrete a Luis Suárez, Correa y Kondogbia. Isi Palazón, Pathe Ciss y Nteka
Apretó el Rayo, más profundo ahora con el despertar de Álvaro García y el Atlético se entregó ya descaradamente al contragolpe. Nteka tuvo el empate en un centro raso y fuerte de Valentín que no amortiguó y echó la pelota por encima del larguero con la portería a placer. La expulsión de Correa por protestar una falta con diez minutos por jugarse le complicó la vida al Atlético. Tuvo que aguardar un bombardeo de centros laterales, con Felipe y Mario Hermoso como refuerzos. Luis Suárez tuvo el gol en una contra en la que se enredó ante el meta rayista. Aguantaron los futbolistas de Simeone sin que Oblak se viera agobiado, salvo por un disparo final centrado de Balliu. La defensa de las rentas mínimas también es una señal de la mejora del Atlético.
El capitán vuelve a marcar un año después
A la vuelta del descanso en el estadio de Vallecas, Koke iluminó al Atlético. El capitán del conjunto rojiblanco, de 30 años, llevaba más de un año sin marcar un gol, exactamente desde el 31 de enero de 2021 en Cádiz. Pero su tanto a pase de João Félix, el número 47 en 535 partidos con el Atlético, permitió a los de Simeone enlazar su quinto triunfo consecutivo en el campeonato de Liga. El Atlético sólo ha perdido uno de sus 14 últimos partidos en Vallecas (con un balance de ocho victorias y cinco empates). La última victoria del Rayo en Liga ya queda lejos, el 18 de diciembre ante el Alavés. Desde entonces, dos empates y ocho derrotas.
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