Europa solo presentará la candidatura ibérica para organizar el Mundial 2030

La renuncia de las federaciones británicas (Inglaterra, Escocia, Gales e Irlanda del Norte) a organizar el Mundial 2030 ha dejado a la propuesta conjunta de España y Portugal como la única aspirante europea. “Albergar una Eurocopa de la UEFA ofrece un rendimiento similar (al de un Mundial) para las inversiones, acarrea un coste mucho menor y los beneficios se alcanzan antes”, explicaron este las federaciones británicas. El proyecto de organizar el Mundial fue sometido a un plan de viabilidad que ofreció dudas por las reticencias a fuertes inversiones de los gobiernos de los cuatro países.

Presentar un único proyecto europeo era la estrategia deseada por el presidente de la UEFA, el esloveno Alexander Ceferin. Con la guerra de la Superliga desatada y la amenaza de lo que decida el Tribunal de Justicia de la Unión Europea sobre si el organismo del fútbol europeo incurre en monopolio como organizador de las competiciones de clubes, Ceferin necesita una institución fuerte a la que no afecte la división entre sus federaciones que hubiera supuesto que compitieran la candidatura ibérica y la británica.

Durante la crisis de la Superliga, Ceferin prometió al primer ministro británico, Boris Johnson, tener en cuenta para el futuro su fuerte oposición a la Superliga. Descartada ya la opción de pujar por el Mundial, a la UEFA le agrada la idea de que los británicos organicen la Eurocopa de 2028. De ese juego de equilibrios de Ceferin ha salido beneficiada la candidatura de España y Portugal, lideradas respectivamente por Luis Rubiales y Fernando Gomes, ambos vicepresidentes de UEFA. Rubiales ha potenciado la propuesta durante la Supercopa de España disputada en Arabia Saudi y fuentes de la federación aseguran que las asociaciones de Oriente Medio apoyarán a españoles y portugueses.

Rival sudamericano

La candidatura ibérica tiene como principal oponente a la sudamericana, formada por Uruguay, Argentina, Chile y Paraguay. Este proyecto tiene como punto fuerte de partida el centenario de la celebración de la primera Copa del Mundo, organizada en territorio uruguayo en 1930. El pasado verano, el presidente de la Conmebol, el paraguayo Alejandro Domínguez, dijo que “la candidatura sigue muy firme”, y añadió: “El corazón del fútbol está en Sudamérica”. Ahora ya no está tan claro que los cuatro países vayan a formar parte de la candidatura final.

La designación del Mundial 2030 será votada por las 211 federaciones de la FIFA. El modelo de elección, en el que antes solo votaba el Comité Ejecutivo, se cambió tras los escándalos de corrupción destapados en el Fifagate con relación al proceso que dio la organización del Mundial 2018 a Rusia y el de 2022 a Catar. En los próximos meses se harán oficiales las candidaturas definitivas para 2030 y la votación será en 2024

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