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Los Rumsas: padre, madre e hijo, caídos por el dopaje

El padre, Raimondas, dio positivo por EPO en 2003; la madre, Edita, fue condenada por importación de sustancias dopantes; el hijo mayor ha dado positivo por hormona de crecimiento cinco meses después de la muerte súbita de su hermano, que investiga la fiscalía

Carlos Arribas
Raimondas Rumsas, padre, a la izquierda, asciende el Zoncolan junto a Pantani en el Giro de 2003.
Raimondas Rumsas, padre, a la izquierda, asciende el Zoncolan junto a Pantani en el Giro de 2003.FRANCK FIFE (AFP)

La historia de Raimondas Rumsas y su familia y su relación con el ciclismo, es tristemente tan simétrica que puede contarse de adelante hacia atrás o de atrás hacia adelante y llegar a la misma desoladora conclusión. Partiendo del presente. Hoy, martes 3 de octubre, el tribunal antidopaje italiano ha anunciado la suspensión provisional de Raimondas Rumsas hijo, de 23 años, ciclista amateur, por un positivo por un precursor de la hormona de crecimiento el pasado 4 de septiembre.

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Retrocediendo. En mayo pasado, hace menos de cinco meses, la fiscalía de Lucca, en Toscana, abrió una investigación por la muerte súbita de Linas Rumsas, de 21 años, hermano pequeño de Raimondas hijo y también ciclista. Entre los investigados, los dirigentes de su equipo amateur y su padre, Raimondas padre, de 45 años y ciclista profesional lituano en la década pasada.

El resto de la historia puede contarse partiendo del 28 de julio de 2002, domingo. Cerca de Bonneville, en los Alpes franceses, la policía detiene a Edita Rumsas, esposa de Raimondas y madre de Linas y Raimondas. En el maletero del coche se encuentra gran cantidad y variedad de sustancias dopantes. “Son para mi madre, que está enferma”, explica La mujer. El mismo día, en París, su esposo ha subido al podio de los Campos Elíseos como tercer clasificado del Tour de Francia, por detrás de Lance Armstrong, ganador de su quinto Tour, y de Joseba Beloki, que disfruta de su tercer podio en París. Es el momento de mayor gloria de un ciclista que había sorprendido un par de años antes ganando el Giro de Lombardía (su primer triunfo profesional) y que en 2001 había ganado la Vuelta al país vasco. La justicia francesa acusa al matrimonio de un delito de importación ilegal de sustancias dopantes.

En enero de 2005, un tribunal de Lyon condena a ambos a cuatro meses de prisión. Para entonces, Raimondas padre ya no es corredor profesional. Su carrera, iniciada en el Mroz polaco y continuada en los equipos italianos Fassa Bortolo y Lampre, sufrió un brusco final en junio de 2003, cuando se anunció que había resultado positivo por EPO durante un Giro de Italia que había terminado sexto. Fue suspendido un año. Tenía 31 años. Volvió al pelotón brevemente en agosto de 2004, y en diciembre colgó la bicicleta. Siguió viviendo en Italia, donde se había establecido al comienzo de su carrera, viendo crecer a sus hijos, que se hicieron ciclistas, como él.

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Sobre la firma

Carlos Arribas
Periodista de EL PAÍS desde 1990. Cubre regularmente los Juegos Olímpicos, las principales competiciones de ciclismo y atletismo y las noticias de dopaje.

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