Los incendios en la región de Valparaíso dejan al menos 51 muertos, aunque el Gobierno advierte que aumentarán las víctimas

El Gobierno de Chile ha dado a conocer este sábado que los graves incendios forestales que azotan la zona centro-sur del país ya han dejado al menos 51 muertos, por lo que se ha transformado en uno de los más mortíferos de la historia reciente. “Tengo la confirmación de 40 personas fallecidas durante los incendios y seis adicionales en recintos hospitalarios producto de las quemaduras”, ha señalado el presidente, Gabriel Boric, sobre la conflagración que afecta principalmente a la región de Valparaíso y, específicamente, a ciudades como Viña del Mar y Quilpué. Boric ha asegurado en una declaración desde La Moneda que “el número de víctimas aumentará en las próximas horas”. Y así fue: la ministra del Interior, Carolina Tohá, ya casi a medianoche ha dicho que hay cinco nuevos fallecidos confirmados.

El presidente afirmó que esta tragedia pudo haber sido provocada voluntariamente. “Se está investigando la eventual intencionalidad de estos incendios y, aunque cuesta imaginar quién podría estar dispuesto a causar tanta tragedia y tanto dolor, sepan que se va a investigar hasta las últimas consecuencias y con todos los recursos necesarios”, añadió el mandatario. Las Fuerzas Armadas y Carabineros vigilan los territorios afectados.

De acuerdo a la fiscal regional de Valparaíso, Claudia Perivancich, en declaraciones a CNN Chile, “hay indicios preliminares” de intencionalidad, “que tiene que ver con la detección de varios focos de fuego que de manera simultánea se habrían producido, y eso es un indicio potente”. Agregó que la Brigada de Delitos Medioambientales de la Policía de Investigaciones (PDI) investiga los hechos, para lo que han analizado los cuatro focos de inicio de fuego en la región, se ha recogido evidencia y explorado el lugar.

El mandatario decretó el viernes el estado de excepción por la catástrofe en las provincias de Valparaíso y Marga Marga, lo que permitirá a su Gobierno “disponer de todos los recursos necesarios” para combatir la emergencia y ayudar a las familias. Ha instruido al ministerio de Defensa desplegar más unidades militares en las zonas afectadas e hizo un llamamiento a la población a seguir las instrucciones de las autoridades correspondientes para no entorpecer las misiones de rescate y de extinción de los incendios. Como se había anunciado horas antes, el Gobierno establece un toque de queda desde las 21.00 del sábado a las 10.00 del domingo en cuatro municipios, como en la jornada anterior: Limache, Quilpué, Villa Alemana y Viña del Mar. “Es indispensable garantizar el orden público y la seguridad de nuestros compatriotas. Utilizaremos todas las herramientas constitucionales disponibles para garantizar la seguridad y tranquilidad”, aseguró el presidente que a mediodía sobrevoló las zonas de la catástrofe.

Boric dijo que el toque de queda ayudará a despejar las rutas para que lleguen los vehículos de emergencia, facilitará las evacuaciones y, de paso, contribuirá “a que no haya nadie merodeando en los lugares donde se toma la determinación de evacuar”, en referencia a los saqueos que ya se han denunciado en municipios como Quilpué. Las amenazas de robos dificultan que los habitantes de las zonas quemadas se allanen a salir de sus viviendas.

La red de salud pública y privada está coordinada para atender a los heridos, manifestó Boric, que expresó el pésame a familiares, amigos y seres queridos de las víctimas fatales. Envió un “fuerte abrazo” a quienes perdieron su hogar y agradeció “profundamente a quienes están dando lo mejor de sí mismos para combatir esta tragedia”, en especial a Bomberos, brigadistas de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), Carabineros, el personal de Fuerzas Armadas, a los trabajadores de la salud, municipales y funcionarios públicos, “además de la sociedad civil que siempre se levantan ante tragedias de este tipo”.

El incendio, que afecta a la zona centro-sur de Chile, ya ha quemado al menos 43.000 hectáreas a nivel nacional, según el balance de la mañana de este sábado. De acuerdo al ministro de Vivienda, Carlos Montes, las viviendas afectadas “oscilan entre 3.000 y 6.000″, aunque “hay que ver el grado de daño, la situación completa, en fin (...) La cantidad es muy grande”.

En la región de Valparaíso, dijo Boric, hay cuatro incendios grandes activos: en Viña del Mar en el sector de Las Tablas, que arrancó en Peñuelas; en Quilpué-Villa Alemana; en Quillota y en el sector de Curauma. Es en Viña del Mar, sin embargo, donde se ha descontrolado, según los brigadistas. El comandante de Bomberos de esta ciudad, Patricio Brito, ha asegurado que la emergencia “se complicó mucho” este sábado. “En este momento tenemos un caos”, admitió, para después expresar que las unidades disponibles no se dan abasto para controlar las llamas. Han llegado refuerzos desde otras regiones, dijo, pero estas no son suficientes. “Tenemos muchas casas quemadas más las fábricas”, afirmó en referencia a explosiones como la de la fábrica de pinturas Tricolor, en el sector industrial de Viña del Mar, en imágenes que circulan en redes sociales, como tantas de la tragedia.

Boric anunció que este domingo estará en terreno y que su ministro de Hacienda, Mario Marcel, informará a la opinión pública sobre los recursos desplegados ante lo que calificó de “una situación realmente muy difícil”. “El fuego avanza muy rápido y las condiciones climáticas que hemos tenido, tanto ayer como hoy, han hecho mucho más complicado el combate de los incendios: altas temperaturas, vientos fuertes, con un promedio de 30 kilómetros por hora y con rachas de hasta 60 kilómetros por hora, y, además, baja humedad”, dijo el presidente.

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