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Colau desahucia a una entidad de divulgación militar del castillo de Montjuïc

El Ayuntamiento de Barcelona acusa a la entidad de "nostálgicos de franquismo" y hace unos años les prohibió celebrar misas en la fortaleza

Alfonso L. Congostrina
El castillo de Montjuïc, escenario del proceso sumarísimo contra anarquistas a finales del siglo XIX.
El castillo de Montjuïc, escenario del proceso sumarísimo contra anarquistas a finales del siglo XIX.CARLES RIBAS

La Guardia Urbana de Barcelona ha desalojado esta mañana la sede social de la asociación de divulgación histórica militar Amigos del Castillo de Montjuïc. La policía municipal ha realizado este trámite acompañados por la comitiva judicial a primera hora de la mañana. La oficina se encuentra en el pabellón de oficiales de la fortaleza de Montjuïc y en el momento en que se ha llevado a cabo la expulsión no había nadie en la sede.

El primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, ha justificado el desahucio: “Acabamos con una anomalía en la ciudad. Esta asociación existía desde 1940 y entre otras actividades celebraba misas en el Castillo de Montjuic cada 18 de julio. Es inaceptable que Trias mantuviera esta entidad, nosotros en 2015 empezamos los trámites para expulsar a esta entidad que estaba llevando a cabo enaltecimiento franquista en un lugar que era precisamente el epicentro de la represión. Hoy hemos recuperado el castillo para usos ciudadanos y recuperamos así la memoria de las víctimas del franquismo”.

En una línea parecida se ha expresado el tercer teniente de alcalde, Jaume Asens: “Comenzamos el mandato en 2015 cerrando la librería neonazi Europa y acabamos echando a los nostálgicos del franquismo del Castillo de Montjuic. Hemos luchado contra los crímenes del franquismo y hemos apostado por recuperar la memoria republicana y democrática”. Asens ha mantenido que era necesario blindar “la memoria antifascista” ante el "peligro de un tripartito de derechas" en el gobierno español.

Amics del Castell de Montjuïc era la última entidad con local que quedaba en el recinto. Los litigios con la entidad comenzaron el primer año de mandato de Ada Colau cuando el equipo de gobierno negó el permiso a la entidad para celebrar una misa por los difuntos de la Guerra Civil. Una tradición que se había instaurado durante el régimen franquista.

Uno de los montajes de la exposición recrea un fusilamiento.
Uno de los montajes de la exposición recrea un fusilamiento.
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